Un comerciante estadounidense fue acribillado a balazos la noche del 17 de febrero del 2009 cuando se encontraba en una discoteca de su propiedad en barrio Los Ángeles de Parrita, Puntarenas.
El pasado jueves, el Tribunal de Juicio de Puntarenas con sede en Aguirre y Parrita, dictó contra los cuatro sospechosos 15 años y cuatro meses de prisión por los delitos de tentativa de homicidio calificado y homicidio calificado.
La víctima fue James Norris, de 47 años y quien tenían cerca de cinco años de residir en la zona de Parrita cuando ocurrió el homicidio.
De acuerdo con el fallo, una mujer de apellidos Vargas Mora y tres hombres identificados como Casanova Cubero, Treminio Gómez y Carcache Castillo, idearon un plan para acabar con la vida del extranjero, quien era socio de la mujer.
Ella contó, de acuerdo con las investigaciones, con la ayuda de Casanova Cubero, quien se encargó de buscar a las personas que cometieran el delito.
Según el fallo, tras varios días de preparativos los ahora condenados, llegaron a un acuerdo.
De esta manera, el 19 de enero de 2009, el extranjero fue atacado a balazos pero sobrevivir gracias a la oportuna atención médica.
El fracaso del plan llevó a la mujer y a los tres hombres a preparar un nuevo ataque y fue así como el 17 de febrero de 2009, Vargas citó a James Norris a un bar de su propiedad, donde en horas de la noche los sujetos Carcache y Treminio lo buscaron y le dispararon, lo que provocó su muerte.
Tras el ataque, los homicidas huyeron del sitio en un taxi informal que los había trasladado desde Hatillo, en San José pero fueron detenidos días después.