Costa Rica afronta una verdadera emergencia nacional debido a las intensas lluvias que han golpeado con especial fuerza el Pacífico sur del país, provocando inundaciones y deslizamientos, y dejando a numerosas comunidades aisladas.
El Instituto Meteorológico Nacional (IMN) confirmó que entre el lunes 4 y el domingo 10 de noviembre, algunas zonas recibieron hasta 1.000 litros de agua por metro cuadrado. Además, esa entidad advirtió a la población del riesgo de formación de un ciclón al norte de Honduras, el cual podría generar más efectos indirectos sobre la costa pacífica costarricense en los próximos días.
Debido a esto, las municipalidades de Osa, Corredores y Golfito, tres de los cantones más afectados por las inundaciones, han incrementado sus esfuerzos para responder a la crisis. Desde albergues hasta operativos de distribución de alimentos y asistencia en zonas aisladas, las autoridades locales han movilizado sus recursos en favor de las comunidades, con el objetivo de minimizar el impacto de los daños.
Municipalidad de Osa
En Osa, los distritos más afectados son Cuidad Cortés, Bahía Drake, Bahía Ballena, Piedras Blancas, Palmar y Sierpe, con un total de 81 incidentes registrados al 13 de noviembre del 2024. Aunque no se reportan fallecidos ni desaparecidos, se ha evacuado preventivamente a 38 personas y se habilitaron tres albergues en el Liceo Pacífico Sur de Ciudad Cortés, el CTP de Osa en Palmar Norte, y la Escuela de Sierpe.
Un total de 23 viviendas, en barrios como Cementerio, Embarcadero, Once de Abril y San Juan de Sierpe, han sufrido daños significativos. Las rutas nacionales y cantonales también han sido impactadas, con el cierre de la ruta nacional 2, de Palmar Norte a Paso Real, y la ruta nacional 245, con problemas de hundimientos. En total, 15 rutas cantonales presentan afectaciones, entre ellas los caminos en Progreso de Cajón y Santa Elena. En cuanto a infraestructura, los puentes colgantes de Riyito y Rincón también han sido impactados, y en San Josecito de Drake y Tinoco, se reportan problemas de abastecimiento de agua.
Las plantaciones de palma aceitera en Piedras Blancas sufrieron daños por la ruptura del dique del río Piedras Blancas, lo que afecta a productores de palma, ganado y tubérculos. La Municipalidad ha solicitado un decreto de emergencia que permita habilitar recursos adicionales para la reconstrucción de las zonas afectadas. También se pidió a la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) el despliegue de maquinaria y la asignación de un geólogo que evalúe las áreas de alto riesgo. Asimismo, urge agilizar el proyecto de un dique en Ciudad Cortés, Palmar Norte y Palmar Sur.
El Comité Municipal de Emergencias de Osa coordina con 26 Comités Comunales de Emergencia, en aras de poder brindar una respuesta oportuna a los incidentes reportados, siempre dando prioridad a la seguridad de las comunidades.
Municipalidad de Corredores
En Corredores, el alcalde, Yeison Hay Villalobos, reportó que las lluvias obligaron a la evacuación de 90 personas que se encuentran albergadas en la iglesia Manantial de Esperanza. Las personas provienen de las comunidades Central Campesina, Castaño, La Estrella del Sur, Campiña, La Bota y Pueblo Nuevo de Coto.
Las lluvias e inundaciones han dejado incomunicadas algunas comunidades, como la reserva indígena de Bajo los Indios y Altos de Buriquí, y el ayuntamiento ha desplegado operativos de distribución de alimentos para dar asistencia a quienes aún permanecen en sus hogares. Villalobos destacó que las autoridades locales trabajan para monitorear cauces y mitigar riesgos en caso de que las precipitaciones se intensifiquen.
Las autoridades en Corredores permanecen en alerta, desplegando operativos para garantizar la atención de las zonas más afectadas.
Municipalidad de Golfito
El alcalde de Golfito, Freiner Lara, informó de que, en ese cantón, las comunidades indígenas han sido las más impactadas por las lluvias. Actualmente, se cuenta con dos albergues habilitados para la atención de las emergencias. Durante los últimos seis días, 364 familias han recibido asistencia en Golfito y Punta Burica.
La Municipalidad de Golfito cuenta con el apoyo de un grupo del Ejército salvadoreño, que, junto con bomberos, cruzrojistas y baquianos, ha establecido dos equipos operativos. Uno se encarga de distribuir alimentos y el otro realiza reconocimientos de rutas para facilitar el acceso a las comunidades más aisladas. Lara explicó que se habilitó un centro de operaciones en el Liceo de Conte y se planea abrir más centros para cubrir las necesidades en la región, desde Golfito hasta Punta Burica.
Con estas acciones, las municipalidades del Pacífico sur buscan mitigar los efectos de las lluvias y coordinando de mejor forma el uso de recursos y equipos de emergencia.