Un mecánico automotriz de apellido Jiménez, de 44 años, quien permanece hospitalizado tras ser baleado, escondía $3 millones (¢1.632 millones), ¢2, 5 millones y tres kilos de cocaína en su vivienda, confirmó ayer el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
El hallazgo del dinero se registró la noche del jueves en San Lorenzo de Flores, Heredia, luego de que Jiménez sostuvo una acalorada discusión con dos sujetos dentro de una casa, mientras un tercero esperaba por fuera, en un carro.
Francisco Segura, director del OIJ, dijo ayer que los dos hombres le preguntaban al sospechoso, a gritos, dónde estaba la plata. Al no obtener respuesta, estos le dispararon en el abdomen.
Los sujetos escaparon del sitio a bordo de un vehículo con rumbo desconocido, mientras el mecánico fue auxiliado por la Cruz Roja.
“Una vez que los agentes ingresan a la casa, notan cosas extrañas, como que el piso de dos cuartos había sido levantado; además de que había un paquete extraño debajo de una mesa”, relató Segura.
El jefe policial manifestó que, aunque al principio se pensó que el paquete era droga, los agentes descubrieron al abrirlo que contenía $76.000 (¢41 millones) en efectivo.
Baño como bóveda. Horas después y ya con la orden de un juez para allanar el inmueble, los agentes del OIJ de Heredia divisaron un baño que estaba clausurado de manera irregular. “Estaba cerrado con unas láminas como de durpanel . Al abrirlo, descubrimos dinero y poco más de un kilo de cocaína. Esos paquetes venían sellados al vacío y con montos escritos por fuera que, sumados, dan más de $3 millones”, detalló Segura.
La Policía Judicial confirmó que Jiménez no cuenta con antecedentes y que vivía con su madre. Sin embargo, ella no estaba en la casa en el momento del ataque.
Sobre el origen del dinero, el jerarca afirmó que todo sugiere que es producto del narcotráfico, pero que, antes de asegurarlo, analizarán a las personas con quien tenía relación el ahora herido.
Vecinos entrevistados por el OIJ no hablaron mucho de lo ocurrido y se limitaron a decir que solo escucharon los gritos. De momento, Jiménez está delicado en el Hospital San Vicente de Paúl, en Heredia.
Una vez que el ofendido se recupere, deberá enfrentar una causa por el delito de legitimación de capitales, por el que afrontaría penas de entre ocho y 20 años de prisión.
Debido al gran riesgo de trasladar tanto dinero, fue necesario llevarlo en un camión remesero de un banco estatal para su posterior conteo. Colaboró Hulda Miranda