EscucharEl ministro de Seguridad, Mario Zamora Cordero, declinó referirse al decomiso de casi media tonelada de cocaína que llegó hace unos días al puerto de Málaga, España, procedente de Moín, en el Caribe costarricense.
“Del tema de España no tenemos nada que decir hasta que la operación del lado español y costarricense esté cerrada”, dijo este jueves a las 10:40 a. m. en un mensaje por WhatsApp, tras múltiples intentos por contactarlo.
El miércoles por la mañana, cuando la Cadena Ser de Málaga informó del cargamento, el ministro solo manifestó que fue Costa Rica la que alertó del alijo a las autoridades españolas y que, en nuestro país, la Policía de Control de Drogas inició una investigación para identificar a los emisores, según consta en un video de 90 segundos divulgado por la oficina de prensa del Ministerio de Seguridad Pública (MSP).
Horas más tarde, en la conferencia de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el jerarca señaló brevemente que se trataba de una operación que “aún está caliente” porque todavía había personas en proceso de ser detenidas en España.
“Vamos a indicar que agradecemos la referencia que se hace de la alerta policial dada desde Costa Rica para estos efectos, pero la operación no ha cerrado. Hasta que la operación cierre nos referiremos oficialmente a la misma desde el lado costarricense”, manifestó.
Pese a que en reiteradas ocasiones se le solicitó una entrevista, vía WhatsApp, declinó contestar los mensajes. Tampoco hubo respuesta a las llamadas telefónicas hechas a su teléfono celular, ni a las consultas enviadas a la oficina de prensa, que el miércoles indicó: “El señor ministro atenderá posterior a la conferencia de prensa del presidente de la República”.
Empero, tras el Consejo de Gobierno, el jerarca priorizó el otro decomiso de droga, acaecido a finales de agosto en Róterdam, cuando las autoridades de Países Bajos (Holanda), detectaron 496 kilos de cocaína ocultos en una carga legal de piña.
Ese mismo día, ante consultas del medio AmeliaRueda.com, Zamora les respondió que en el caso de Málaga aplicaba el artículo 295 del Código Procesal Penal, refiriéndose a esta fase del proceso de investigación que no es pública para terceros.
Se quedan sin responder datos como la cantidad de droga decomisada, en qué barco zarpó de Costa Rica y en qué fecha, cuál escáner revisó el contenedor contaminado y cómo le informaron a España del narcotráfico.
El cargamento de Málaga es el segundo que trasciende esta semana, pues el lunes La Nación dio cuenta del alijo descubierto en Róterdam el 22 de agosto.
Ambos decomisos ocurren después de que el Gobierno pusiera en operación, el 13 de julio, dos escáneres en la Terminal de Contenedores de Moín, para que revisaran el 100% de la carga en contenedores que pasara por el puerto administrado por la firma holandesa APM Terminals.
Desde aquella fecha, el presidente de la República, Rodrigo Chaves, y el ministro de Seguridad, Mario Zamora, afirmaron en reiteradas ocasiones que no había salido ni un solo gramo de cocaína hacia Europa desde que se inició la operación con escáneres y policías de la Fuerza Pública en APM Terminals.
Colaboraron en esta información Yiren Altamirano y Hugo Solano.
