En dos escenarios diferentes de entrada y salida de mercaderías a nuestro país, la Policía de Control de Drogas (PCD) y el Servicio de Vigilancia Aérea (SVA) decomisaron, en total, 5,5 toneladas de droga.
Uno de los casos que más llama la atención ocurrió en el almacén fiscal conocido como Aduana La Anexión, ubicado en el aeropuerto internacional Daniel Oduber, en Liberia, donde inspeccionaron un cabezal y un furgón con placas guatemaltecas que atravesó varios países del istmo hasta llegar con la ilegal carga de 3.168 kilos de marihuana a Guanacaste. El valor de ese alijo de droga en el mercado local ronda los ¢9.500 millones.
Los oficiales antidrogas detectaron varias anomalías, ya que el peso declarado por el transportista, de apellido Menéndez, no correspondía con el cargamento lícito procedente de México, que se trataba de caucho. Según el análisis realizado por la PCD, se verificó que la carga venía contaminada con droga y se determinó que eran más de tres toneladas de marihuana.
De acuerdo con Daniel Calderón, viceministro de Seguridad, esa marihuana llegó a nuestro país, al parecer procedente de México, por lo que se trata de una ruta no tradicional, pues generalmente los ingresos son de Colombia y de Jamaica, por vía marítima.
“Sabemos que en México se siembra marihuana, pero no es normal que nos llegue de ese país, por lo que a partir de este operativo vamos a analizar quiénes están detrás, porque es una cantidad muy importante”, dijo el jefe policial.
Se presume que era para abastecer el mercado local, pues el camión atravesó Centroamérica y el destino final del trailer era nuestro país. La existencia o no de una organización mexicana detrás de este trasiego es parte de lo que ahora investiga la Policía.
Las autoridades capturaron al camionero, un guatemalteco de apellidos Menéndez Méndez, de 51 años, quien se expone a penas entre ocho y 15 años de prisión, según lo estipulado en la legislación vigente.
Otro trailero cayó en Moín
En otro golpe contra redes locales de crimen organizado, oficiales de la PCD detectaron y decomisaron más de 2,3 toneladas de cocaína en un contenedor en la Terminal de Contenedores de Moín (TCM).
Los oficiales inspeccionaron dicho contenedor y encontraron 2.352 paquetes de un kilo de cocaína cada uno, que iban entre una carga de fruta fresca que tenía como destino el puerto de Amberes, en Bélgica.
Para ese mismo puerto europeo iban otras dos toneladas de coca que fueron interceptadas en abril pasado por la PCD, en contenedores cargados de café y frutas.
Por el caso de este sábado, la Policía detuvo a un trailero de apellido Chacón, limonense de 39 años, como sospechoso de movilizar la ilícita mercancía decomisada. La Fuerza Pública dio seguimiento al camión y al conductor, por lo que se llevó a los patios de la terminal portuaria, donde se logró la captura.
Tanto en el caso de Liberia, como en el de Moín se dejó a los choferes a la orden de las fiscalías respectivas para que se les defina su situación jurídica.
Cada kilo de cocaína ronda los ¢4 millones, por lo que esa carga cuesta unos ¢9.400 millones en Costa Rica, mientras que en Europa el valor de cada kilo se dispara a aproximadamente a $50.000.
Reclutar camioneros nacionales y extranjeros para movilizar estas cargas, así como personal a lo interno del muelle de APM, es parte de las labores que realizan las estructuras criminales, que en muchas ocasiones los dejan a su suerte luego de que caen en manos de la Policía y quedan a expensas de un juicio donde la pena mínima es de ocho años.
El domingo pasado un camionero de apellidos Herrera Soto, de 48 años, fue capturado por la PCD en Moín de Limón, cuando llevaba 634 kilogramos cocaína distribuidos en 45 sacos.