El niño Dereck Díaz Durán, de 8 años, quien resultó herido de bala en la espalda cuando veía un desfile de payasos, está fuera de peligro.
El médico Rodolfo Hernández Herrera, director del Hospital Nacional de Niños, explicó que la bala no afectó ningún órgano vital, como los pulmones, el hígado ni el corazón, entre otros.
Agregó que el plomo atravesó algunos tejidos que están en proceso de ser reparados.
Hernández expresó que el menor se encuentra bien, consciente y no tiene ninguna dificultad para respirar. Es factible que permanezca internado durante esta semana para verificar que la recuperación sea totalmente satisfactoria.
Por disposición médica, no extraerán la bala del cuerpo, puntualizó el doctor Hernández.
Antecedente. El niño Dereck Díaz resultó herido de bala el domingo, a la 1 p. m., cuando observaba un desfile de payasos cerca de la entrada a la urbanización La Capri, en San Miguel de Desamparados, provincia de San José.
Testigos dijeron a las autoridades haber visto a tres individuos que bajaron de un vehículo Datsun y comenzaron a disparar a un sujeto que iba caminando.
Luego de hacer varios disparos, huyeron del lugar.
El niño presentaba el impacto de bala en la espalda, por lo que fue llevado en un carro particular a la clínica Marcial Fallas y después al Hospital Nacional de Niños.
Pesquisa. Entre tanto, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) trataba de localizar ayer a los testigos que ayudaran a dar mayor características del vehículo para localizarlo y dar con los posibles ocupantes.
La idea es, con la versión de los testigos, tratar de identificarlos.
Empero, personas ligadas a las pesquisas dijeron que, en estos casos de balas perdidas, las investigaciones se complican porque las personas por lo general no observan a la persona que hizo los disparos.
Con el caso de Dereck Díaz son tres los menores heridos este año por balas perdidas.