El 29 de junio de este año, un oficial de la Fuerza Pública detuvo en el puesto fronterizo de Paso Canoas, en Corredores, en la zona sur, un camión cargado con licores de contrabando procedente de Panamá.
El vehículo es propiedad de unos empresarios residentes en la ciudad de Cartago, a quienes en otras oportunidades la policía judicial había detenido por las mismas razones.
Sin embargo, aquel 29 de junio, el vehículo con la carga de licores no tardó mucho tiempo en ser liberado.
Al lugar llegó, en cuestión de minutos, el jefe regional de la Fuerza Pública, Luis Ortega, quien tras analizar el caso pidió al oficial, (subalterno suyo) liberar el vehículo con la mercadería.
Este hecho llevó al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) a presentar una denuncia contra el jefe policial bajo el cargo de incumplimiento de deberes. La denuncia se tramita en la Fiscalía de Corredores.
De acuerdo con el OIJ, Ortega no tenía razones legales para liberar el vehículo. Además, ya la Fuerza Pública conocía bien que a los empresarios cartagineses se les investigaba por contrabando de licores.
El ministro de Seguridad Pública, Rogelio Ramos, confirmó ayer que la denuncia del OIJ, más otros hechos en investigación, motivaron el traslado de puesto de Ortega al Departamento de Apoyo Legal de ese ministerio. "Por ahora no podemos separarlo en forma definitiva; vamos a esperar el resultado de las pesquisas judiciales", dijo Ramos.
El sustituto de Ortega en la zona es el oficial Daniel Calderón, quien hasta ayer ocupó la subdirección de la Fuerza Pública de Alajuela.
Más casos. Pero el caso de Ortega no es el único en la zona sur.
Ramos también confirmó que el jefe policial de San Vito de Coto Brus, de apellido Cruz, y el de Ciudad Neily, de apellido Mén dez, son objeto de una investigación y que posiblemente serán removidos.
"Por ahora ambos disfrutarán de sus vacaciones", dijo.
A Cruz, con más de 16 años de laborar para la Fuerza Pública, se le sigue una causa en la Fiscalía de Corredores por una supuesta extorsión con trasiego de licores.
Una demanda similar enfrenta desde hace varias semanas el oficial Méndez, quien lleva varios años de laborar en la zona.
Ayer n o fue posible hablar con ambos jefes policiales pues se hallaban en reuniones.