La falta de combustible para realizar patrullajes es el principal problema que tiene el Servicio Nacional de Guardacostas (SNG) para interceptar los barcos extranjeros que pescan ilegalmente en aguas costarricenses.
Carlos Alvarado, director del SNG, al admitir la debilidad, dijo que actúan cuando reciben denuncias concretas sobre la ubicación del infractor.
Precisó que este año se han pasado a la Fiscalía 32 embarcaciones costarricenses por trabajar sin las licencias correspondientes.
Agregó que son conscientes de la necesidad de proteger las aguas nacionales, sobre todo las cercanas a la Isla del Coco. No obstante, advirtió que las patrulleras de Seguridad Pública no tienen capacidad para ir desde Puntarenas y patrullar en el lugar pues necesitan ser recargadas de combustible en la isla.
Alvarado señaló que actualmente se desarrolla un operativo en el lugar con el apoyo de Marviva, una ONG, y el Servicio de Parques Nacionales del Minae.
Alvarado manifestó que la acción policial comenzó a rendir frutos pues localizaron una importante cantidad de artes de pesca. Agregó que se trataba de líneas con anzuelos y boyas, las cuales no estaban adheridas a ningún barco.
Relató que los responsables, al percatarse de la acción policial, decidieron abandonarlas.