La zona norte del país y la provincia de Limón enfrentan fuertes aguaceros debido al sexto empuje frío de la temporada, lo que ha provocado inundaciones en fincas, calles y algunas viviendas en Pococí de Limón, Guatuso de Alajuela y Sarapiquí de Heredia.
La Cruz Roja movilizó a dos familias en barrio La Liga, en San Rafael de Guatuso. Se trata de siete niños y cuatro adultos trasladados a casas de familiares en Maquencal. Las comunidades afectadas en Guatuso incluyen barrio La Liga, Pataste, San Juan, El Edén y Valle del Río. Durante la tarde, los socorristas evacuaron a más personas en riesgo de quedar atrapadas en barrio La Liga.
En Sarapiquí se registraron inundaciones que dejaron aisladas a dos familias en las regiones fronterizas de Cureña y Llanuras del Gaspar. La alcaldesa Vanessa Rodríguez informó que también hubo daños en Muelle de Puerto Viejo, donde el río Sarapiquí se desbordó, así como en Chilamate y El Montero de Sarapiquí. Durante el sábado, las lluvias continuaron en las zonas altas, lo que hizo prever que las inundaciones persistirían. El río San Juan también rebalsó su cauce.
En Guápiles y Guácimo, los caminos, vados y puentes fueron superados por el aumento del nivel de los ríos, como el Guápiles y el Santa Clara, cuyo caudal creció casi un metro. En Roxana de Pococí, cerca del cementerio, se registraron anegamientos y los vecinos colocaron latas de zinc en las entradas de las viviendas para frenar el paso del agua.
En Cartagena de Guácimo, los ríos Guácimo y Guacimito también se desbordaron, aunque no fue necesario habilitar albergues. En Puente Negro el nivel del agua alcanzó los rieles de la vía férrea; mientras que entre Guácimo y Río Jiménez, las calles quedaron completamente cubiertas por el agua.
Las crecidas arrasaron con árboles que estaban a la orilla de los cauces y fueron llevados aguas abajo por las corrientes de los ríos.
Según la Comisión Nacional de Emergencias, hasta las 4 p. m. se reportaban 54 incidentes por inundaciones, la mayoría en Guácimo (19), Pococí (18) y Limón (11). También hubo alertas en Guatuso, Sarapiquí, Matina y Quepos.
Efecto continuará hasta el lunes
Según Roberto Vindas, meteorólogo del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), la línea de cortante asociada al empuje frío se posicionó sobre el país. Este fenómeno, junto con el alto contenido de humedad y la inestabilidad atmosférica, generan cielo nublado, lluvias variables y temperaturas frescas en gran parte del territorio nacional.
Al mediodía, los montos de precipitación alcanzaban 75 litros por metro cuadrado (mm) en el Caribe norte y la zona norte, 30 mm en el Caribe sur y 15 mm en el Valle Central y el Pacífico norte. En el Caribe y la zona norte se prevé que las lluvias continúen con intensidades de moderadas a fuertes, por lo que se pide precaución debido a la saturación de los suelos, que aumenta la vulnerabilidad a desbordamientos.
En el Valle Central y Guanacaste se mantendrán lluvias de intensidad débil a moderada, acompañadas de ráfagas de viento que podrían alcanzar velocidades entre 30 y 45 km/h en el Valle Central y entre 30 y 75 km/h en el norte de Guanacaste y las cordilleras.
Se estima que la influencia del empuje frío continuará sobre el país al menos hasta este lunes. Las cuencas en la zona norte y el Caribe presentan niveles de saturación del 85% al 100%, por lo que incluso lluvias moderadas podrían provocar desbordamientos de ríos.
La alerta amarilla sigue vigente para todo el Caribe, la zona norte y los cantones de Oreamuno, Alvarado, Paraíso, Jiménez y Turrialba en Cartago. Además, rige una alerta verde para el Valle Central y Guanacaste debido a los fuertes vientos.
Colaboró el corresponsal Reiner Montero, Pococí.