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El fin era que la dirección del colegio les autorizara el uso de pantalones ajustados, pero la protesta callejera de un grupo de estudiantes del Liceo José Joaquín Vargas Calvo –en Montes de Oca– degeneró poco después en un violento choque con la Policía.
Las autoridades arrestaron a 12 estudiantes de ese centro educativo y a dos particulares, estos últimos mayores de edad. Todos quedaron libres poco después.
Los alumnos utilizaron piedras, huevos e incluso bombas químicas de fabricación casera para provocar –y luego enfrentar– a la Policía. En la escaramuza resultó herida en la cabeza una estudiante de décimo año, impactada por una piedra.
El malestar del estudiantado comenzó hace tres días, cuando el director, Abraham Barboza, anunció que no permitiría pantalones estrechos en la institución.
A los padres se les remitió una circular. “El problema es por el uniforme. Vienen con pantalón ‘tubo’, muy tallado. Les pedimos que vengan con ropa menos ajustada. La circular que mandamos a las casas dice que, de no acatar la disposición, los estudiantes tendrán que presentarse con sus padres de familia”, puntualizó el educador.
Al alumnado le dieron tiempo hasta después de vacaciones para acatar la medida.
“A principios de año no nos dijeron nada; hasta meses después nos avisaron, sin saber si podemos comprar pantalones”, explicó una estudiante de sétimo año.
La turba persiguió a uno de los oficiales y se apoderó de su vehículo. Algunos jóvenes desmantelaron la bicicleta.
El jefe de la delegación policial de Montes de Oca, Érick Calderón, acudió para apaciguar los ánimos, pero en vez de eso fue recibido con piedras, huevos y bombas que los jóvenes fabricaron con botellas de refresco, aluminio y un ácido para limpieza de cerámica.
Luego llegó el vandalismo.
Los estudiantes (unos 150) se lanzaron en estampida tras la prensa. A pedradas rompieron el parabrisas de un vehículo de Repretel. También resultó dañada una patrulla.
Otro grupo de colegiales quemó un arbusto cercano a la línea del tren.
Para ese momento, tal como lo describió el jefe regional de la Fuerza Pública, Raúl Rivera, la situación “era insostenible”.
Por eso se dio el visto bueno para que los oficiales evantaran el bloqueo poco antes de las 11 a. m.
Los muchachos corrieron por la línea del tren en dirección a la Universidad Latina. En ese tramo la Fuerza Pública aprehendió a varios de los jóvenes.
Ellos fueron pasados en horas de la tarde ante la Fiscalía Penal Juvenil. Les formularon partes por daños, obstrucción de vía pública y resistencia agravada.
El jefe policial Rivera dijo que es la primera ocasión en que manifestantes lanzan bombas caseras de reacción química. “Eso solo lo había visto fuera del país”, puntualizó.