Aguaceros dejan 325 incidentes y superávit de lluvias en primera quincena de junio

Según la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), desde que arrancó la estación lluviosa, en mayo pasado, se han registrado un total de 584 contingencias, principalmente en Cartago, Garabito, Quepos y Alajuela. De ellas, la mayoría han ocurrido en junio.

Daniel Poleo, del departamento de Desarrollo del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), manifestó que solo entre el viernes y el domingo pasados cayeron unos 350 litros por metro cuadrado o milímetros (mm) en la península de Osa.

Sin embargo, explicó que por tratarse de una zona boscosa y con muy poca población, no se reportaron incidentes. Otra gran parte de las precipitaciones cayeron al mar.

Mientras tanto, en los alrededores del aeropuerto Daniel Oduber, en Liberia, hasta el momento ha caído un 85 % más de lluvias con respecto al promedio de todo el mes de junio.

En el Valle Central, el superávit ronda entre el 50 % y el 60 %, lo mismo que en toda la península de Nicoya, Santa Cruz y el cantón de Orotina. Poleo destacó que, en el caso de Guanacaste y el Pacífico sur, fueron los aguaceros del pasado fin de semana las que elevaron el promedio.

Las regiones donde todavía prevalece un déficit son el Caribe y la zona norte. A pesar de que en junio, julio y agosto suele llover más, todavía no se ha alcanzado el nivel de precipitaciones esperado, y se arrastra un déficit desde el año pasado.

Durante la presente estación lluviosa, el país ha sentido el paso de 10 ondas tropicales y de otros fenómenos que han causado inundaciones en distintas partes del territorio nacional como Alajuela, San Carlos y San José.

El pasado 8 de junio, el cantón Central de Cartago registró destructivos aguaceros con ráfagas descendentes de viento y granizo, las cuales se volvieron a formar pero con menor intensidad este 17 de junio y afectaron varias casas en Dulce Nombre.

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Junio es lluvioso

Por lo general, durante la primera etapa de la fase lluviosa, junio es uno de los meses con más precipitaciones. Lo anterior porque en julio y agosto ocurre un fenómeno llamado canícula, que consiste en una serie de días secos.

Las canículas son mucho más prolongadas que el denominado veranillo de San Juan, que comenzará el próximo fin de semana y, además, afectan una zona geográfica más amplia, pues cubren el Valle Central y todo el litoral del Pacífico.

Durante este fenómeno, son comunes las masas de aire seco e incluso la llegada de polvo del Sahara, lo que reduce las precipitaciones. Sin embargo, este año se espera que sean menos intensas debido al fenómeno de La Niña, que se prevé para el último trimestre del año.

Se espera que las canículas comiencen el 10 de julio y se extiendan hasta el 15 de agosto, para luego dar paso a la parte más fuerte de la estación lluviosa.

La temporada de huracanes, que comenzó el 1.º de junio y termina el 30 de noviembre, sigue sin actividad significativa. Por ahora, solo se vislumbra un fenómeno en las costas del golfo de México, con posibilidades de desarrollarse como tormenta tropical en las próximas horas, pero no tendrá efecto sobre Costa Rica.

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