El año 2023 se erigió como un periodo crítico para la seguridad en Costa Rica, donde la serenidad y la paz de los ciudadanos se vieron gravemente afectadas por una serie de homicidios que dejaron una huella imborrable en la historia del país.
Lamentablemente, estos actos violentos se desarrollaron en lugares inimaginables, como afuera de escuelas, plazas de fútbol y hasta un hospital, generando una profunda incertidumbre en temas de seguridad en la sociedad para el 2024.
De acuerdo con las últimas actualizaciones proporcionadas por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), el año 2023 presentó un alarmante promedio de un asesinato cada 10 horas. Este panorama se refleja de manera más intensa en las estadísticas de las provincias de San José, Limón y Puntarenas, que lideraron el registro con 222, 213 y 149 casos de homicidios, respectivamente.
Al cierre de esta nota, a las 4 p. m. del 31 de diciembre, las estadísticas del OIJ revelan un total de 907 asesinatos en lo que va del año. Este número, tristemente, consolida el 2023 como el año más sangriento en la historia de Costa Rica.
Año crítico
Gustavo Mata, exministro de Seguridad Pública y exjefe del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), conversó con La Nación sobre la realidad “crítica” que ha vivido el país. En tema de los homicidios este año, en comparación al 2022, hubo 246 casos más.
De acuerdo con el exministro Mata, han existido varios factores como la falta de presupuesto que ha tenido el Ministerio de Seguridad Pública (MSP).
“Tristemente hoy estamos viendo lo que genera la falta de prevención y de contención, que es una responsabilidad que no es del OIJ, es de Seguridad Pública. El OIJ está recargado por la falta de prevención y contención y algo que lo hemos venido advirtiendo desde principio de año”, afirmó Mata.
Aunado a la crisis de homicidios que enfrenta el país, Mata añade que otros delitos también aumentaron durante el año “como los robos de vivienda y los robos de carro”.
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Proyección
El exministro afirmó que la situación en el país va a empeorar para el 2024 si algunos factores, como el aumento del ingreso de droga y el incremento del crimen organizado, así como los minicarteles, se siguen fortaleciendo.
“Costa Rica se ha convertido en uno de los consumidores de droga, principalmente la cocaína, nunca esperaba yo decir eso. ¿A qué se debe? A que los grupos organizados están cobrando en kilos de cocaína por cada tonelada que reciben para reexportarlos hacia Europa o Estados Unidos, ellos piden un porcentaje de la droga, que es la que se queda en Costa Rica y es la que ha generado estos minicarteles que están luchando por territorio a nivel nacional”, explicó Mata.
Además del mayor consumo de la cocaína, el exministro también advierte del ingreso de armas de grueso calibre con el que las organizaciones criminales están usando para perpetrar las guerras contra otras bandas y defender los territorios en los que están asentados.
“Están trayendo armamento del triángulo como el M16, AK-47 y AR-15 y las cambian por cocaína, que es la nueva moneda de Costa Rica”, aseguró.
Entre las cosas que espera el exjerarca de Seguridad es que se empiecen a dotar de recursos a las diferentes policías del país para que puedan equiparar las fuerzas en el combate contra la inseguridad, pues “hay estudios claros que demuestran que no se están haciendo las cosas como tienen que ser”.
“No visualizo una mejora, en el sentido que el (Poder) Ejecuto no va a invertir en seguridad e incluso me preocupa cuando el ministro de Seguridad (Mario Zamora) dice que con la plata que le den, él se la juega y realmente necesitan un apoyo importante a nivel económico para dirigir los cuerpos policiales”, enfatizó Mata.
INSEGURIDAD 2023
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