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Un decreto presidencial autoriza el uso de armas automáticas a policías del Ministerio de Seguridad y de la Unidad Especial de Intervención (UEI), adscrita al Ministerio de la Presidencia.
Se trata el decreto ejecutivo 44699-MP-SP, anunciado este miércoles por el presidente Rodrigo Chaves. En el documento, firmado este martes, se aprueba el uso de “armas de fuego que, con una sola acción del disparador, proyecten sucesivamente (en ráfaga) más de una ojiva, ante aquellas situaciones que así lo ameritan”.
Asimismo, se prohíbe el uso de estas armas en la intervención de huelgas o manifestaciones.
Si bien la Ley de Armas y Explosivos prohíbe las armas automáticas, el gobierno cita el artículo 24 de dicha legislación, que indica que “cuando el servicio lo amerite y en situaciones excepcionales, el Poder Ejecutivo, debidamente fundamentado y mediante decreto, autorizará a esas autoridades (Fuerza Pública) el uso de armas prohibidas para el ejercicio de sus funciones”.
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Se argumenta además que esta es una forma de contrarrestar el uso de armas de grueso calibre por parte de los criminales.
Según datos del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) mencionados en el decreto, entre el 1.° de enero del 2021 y setiembre del 2024 se cometieron 2.139 homicidios con armas de fuego, y en el mismo periodo se incautaron 8.291 armas. En el 2023, fueron 94 armas automáticas decomisadas, mientras que en el 2024 la cifra es de 25, según el Sistema de Aprehensiones y Decomisos de la Fuerza Pública.
Asimismo, en lo que va del 2024, un 74% de los asesinatos con arma de fuego tuvieron como móvil el ajuste de cuentas.
“Por lo anterior, es necesario que nuestros cuerpos policiales puedan utilizar armas que disparen en ráfaga, ya que estas, al tener una mayor capacidad de fuego, resultan más útiles al enfrentar a la delincuencia armada”, señala el documento.
En declaraciones enviadas por su oficina de prensa, el ministro de Seguridad, Mario Zamora, sostuvo que esta disposición permitirá equiparar la fuerza ante grupos criminales y proteger a los oficiales de Policía.
Durante el anuncio, no se precisó si se aprovecharían armas decomisadas, o si se comprarían armas nuevas, cuál sería el costo para el país y de dónde provendrían los recursos. El mes pasado, el gobierno renunció a aumentar el número de policías en el 2025. En aquel momento, el ministro confirmó a La Nación que el Poder Ejecutivo optó por subir los salarios de los oficiales antes que sumar más plazas.
“Favorecimos un criterio cualitativo sobre uno cuantitativo, basado en el sistema de integridad policial. Muchos colegas nos han dicho: ‘es mejor una policía pequeña y eficiente, y no masiva y fuera de control’”, manifestó.
Exministro cuestiona decreto
El decreto fue cuestionado por el exministro de Seguridad, Gustavo Mata, quien puso en duda la capacidad del gobierno de comprar dichas armas y de dar el entrenamiento adecuado a los oficiales.
“¿De adónde va a coger plata (el ministro de Seguridad) Mario Zamora, si ni siquiera tiene plata para comprar botas y uniformes a los policías?”, aseguró Mata a La Nación.
Además, consideró que esa no es la opción más segura para combatir el crimen organizado, pues hay un mayor riesgo de víctimas colaterales por el alto alcance de las balas, así como de que las armas terminen en manos de los criminales, quienes no tendrían contemplación en dispararles a los policías para quitarles los fusiles.
“Así como vendieron la idea de que los escáneres iban a parar el consumo y la exportación de droga, esto va a ser igual, si es que compran las armas”, manifestó el exministro.
