Un empleado de una empresa comercial de Parrita, Puntarenas, fue detenido como sospechoso de difundir pornografía infantil.
La captura del sospechoso, de apellidos Robleto Martínez, de 26 años, ocurrió este jueves por la mañana en la vivienda del hombre.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó de que el sujeto estaba en un grupo de mensajería en Internet en el que se compartía material de este tipo entre usuarios de diferentes partes del mundo.
“La investigación arrancó hace 10 meses, en abril del 2018, por el delito de difusión de pornografía infantil, luego de una información confidencial que recibimos. Como parte de las diligencias se logró identificar a un sospechoso de 26 años, quien envió una gran cantidad de videos”, manifestó Erick Lewis, jefe de la sección de Delitos Informáticos de la Policía Judicial.
Agregó que en el chat de mensajería hay más de 200 personas y que de momento no se han detectado más personas en Costa Rica que formen parte de la red.
Lewis también destacó que tampoco hay indicios de que el país haya víctimas o de que se produjera material.
“Parte de la análisis forense nos permitirá establecer si hay pornografía producida en el territorio nacional, así como si mediaba algún pago de dinero o solo se compartía el material, como es usual en estos grupos", aseguró el jerarca judicial.
Los menores que aparecen en los videos que difundió Robleto tienen entre 2 y 8 años, mencionó Lewis, quien destacó que con el paso del tiempo han realizado investigaciones que les permiten afirmar que las víctimas son cada vez menores en edad.
“En los videos hay niños teniendo relaciones con otros niños, pero también niños con adultos”, dijo el jerarca judicial.
Los hallazgos
En el allanamiento realizado en la casa de Robleto se decomisaron cuatro celulares, una computadora y varios dispositivos de almacenamiento que serán analizados por forenses, para obtener más datos sobre el caso.
La idea es conocer si además del grupo de mensajería, el sujeto obtenía o compartía los videos por algún otro medio.
“En estos grupo usualmente se comparte material, hay personas pasivas, que solo se dedican a ver, pero hay otras más activas y, en el caso de este sujeto, él difundía videos constantemente”, añadió el jefe de Delitos Informáticos.
Lewis destacó que luego de los análisis forenses se podrá comunicar a policías de otros países para que estén al tanto de la situación y procedan a realizar las diligencias correspondientes.
Robleto fue pasado al Ministerio Público con el informe correspondiente.
La pena establecida en la legislación costarricense por la difusión de pornografía es de uno a cuatro años de cárcel.
El 5 de junio del 2018 dos sujetos fueron aprehendidos por este mismo delito, luego de que la Policía Internacional (Interpol) en España realizara una investigación que permitió establecer la ubicación de los sujetos en Costa Rica.
A los individuos se les vinculó con dos grupos de WhatsApp, en los cuales se compartían videos y fotografías de personas menores de edad realizando actos sexuales.
Información actualizada a las 5:25 p. m. con más datos del OIJ.