Un hombre que había sido asistente en consultorios fue detenido por simular ser un profesional en Medicina para realizar tratamientos estéticos.
La captura correspondió a oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en la casa del imputado, de apellido Vargas y 47 años, en El Alto de Guadalupe, Goicoechea.
Durante la acción policial, la cual fue coordinada por la Fiscalía Adjunta de Goicoechea y realizada el miércoles, también se allanó la clínica del imputado, localizada en la ciudad de Curridabat.
La oficina de prensa de la Fiscalía General comunicó que contra Vargas se abrió un proceso como sospechoso del delito de ejercicio ilegal de la profesión. El artículo 322 del Código Penal establece una pena que va de los tres meses a los dos años para quien “ejerciere una profesión para la que se requiere una habilitación especial sin haber obtenido la autorización correspondiente”.
La Fiscalía pidió dictar contra el sospechoso impedimento de salida del país, presentarse a firmar cada 15 días y no acercarse ni molestar a las ofendidas, durante todo el proceso. Al cierre de edición se desconocía el resultado de la gestión.
Hechos. Las pesquisas en este caso arrancaron en los primeros meses de este año, luego de una denuncia que presentó el Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica y que se tramita con el expediente 15-000451-175-PE.
El fiscal adjunto del Colegio, Alejandro Madrigal Lobo, dijo que fue en setiembre del año anterior cuando diversas personas se presentaron a la sede de la organización a denunciar a un médico de apellido Vargas.
Madrigal explicó que al revisar el archivo se determinó que esa persona no es médico graduado, hecho que le impedía realizar procedimientos quirúrgicos.
Madrigal dijo que al ahondar sobre la persona denunciada, se determinó que laboró como asistente en clínicas estéticas y dermatológicas y luego apareció con una clínica en Curridabat.
El Ministerio Público determinó que en ese lugar Vargas se hacía pasar por médico y aplicaba a sus pacientes tratamientos como mesoterapia, slim láser y gluteoplastia, procedimientos tendientes a mejorar la apariencia del cuerpo y a eliminar grasa de zonas específicas.
En la investigación se determinó que el imputado anunciaba sus servicios en la red social Facebook. Vargas tiene en su contra cinco denuncias por parte de mujeres, quienes alegan que sufrieron por malpraxis.
En los allanamientos se decomisaron computadoras, instrumentos médicos para inyectar la sustancia utilizada en la mesoterapia, dos cajas de ese medicamento y videos del momento en que trataba a las pacientes.
“Este caso ha sido muy fructífero. Recibimos más llamadas de personas con quejas. Lo que hicimos fue remitirlas a la Fiscalía”, dijo Madrigal.