Tres jueces del Tribunal de Juicio de Alajuela reclamaron porque a las mujeres recluidas en la cárcel El Buen Pastor no les suministran toallas sanitarias.
Así lo constataron Mario Rodríguez, Carolina Leitón y Rosario Alvarado, durante una visita que hicieron al centro penitenciario a inicios de noviembre para verificar las condiciones de internamiento de 14 mujeres a quienes ese tribunal les dictó prisión preventiva.
La inspección se debe al nuevo reglamento que la Corte Plena emitió el 28 de julio pasado, que obliga a los jueces a verificar que no se vulneren derechos esenciales a los indiciados.
Alex Víquez, juez coordinador de ese tribunal, detalló que el 20 de noviembre presentaron el recurso de amparo ante la Sala Constitucional, para que se estudie si existe una lesión al derecho a la salud de las mujeres.
“Lo mencionado por las 14 privadas de libertad entrevistadas, en torno al hecho de que el centro de atención institucional no les aporta, a cada una de ellas, toallas sanitarias, situación que pone en riesgo la salud de las privadas de libertad ya que las mismas ( sic ) deben hacer esfuerzos importantes para conseguir los recursos para obtenerlas por medio de terceros o familiares, pero dicha situación se agrava en el caso de las extranjeras, quienes en la mayoría de los casos no poseen familia que les otorgue medios económicos para ello”, resalta en la queja.
Por otro lado, los jueces aseguraron que “el uso de toallas sanitarias es indispensable para el mantenimiento de una adecuada salud de los órganos sexuales femeninos, sumado a que un mal uso de las condiciones de higiene de parte de solo una privada de libertad, podría ser desencadenante de problemas de mayor relevancia”.
Para ellos, el Estado es el responsable de suministrar toallas a las reclusas, pues con el encierro se limita únicamente el derecho a la libertad, y no otros fundamentales, como el derecho a la salud.
En el recurso pidieron que se ordene al Ministerio de Justicia y Paz presupuestar con prioridad la entrega mensual de toallas sanitarias a cada reclusa.
Sin dinero. El amparo señala que las autoridades del centro penal El Buen Pastor confirmaron que no entregan este tipo de producto de higiene personal pues carecen de recursos económicos.
No obstante, Reynaldo Villalobos, director de Adaptación Social, dijo a La Nación que ya giraron órdenes administrativas para adquirir paquetes de toallas sanitarias, las cuales estarían disponibles a partir del segundo trimestre del próximo año.
Explicó que las toallas las facilitan grupos voluntarios y las familias de las reclusas; también el comisariato las vende.
“Los consulados de las embajadas les traen a las extranjeras. Pero, para el próximo año incorporaremos toallas, como algo adicional al jabón de olor, pastas, cepillos de dientes y rasuradoras” que se entregan, añadió.