Una mujer murió la noche del miércoles al sufrir una complicación luego de someterse a una cirugía plástica en los glúteos.
La fallecida fue identificada como Vivian Delgado Arguedas, de 30 años; era madre de tres menores y residía en Escazú, San José.
A ella se le practicó la operación en la clínica privada Unibe, en Tibás.
Luis Wachong Solís, administrador del centro médico privado, comunicó que la paciente “sufrió una situación que requirió su traslado a un centro médico mayor, en este caso, al Hospital Calderón Guardia, según lo que se establece en los protocolos de atención para situaciones como la presentada”.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó de que a las 11 p. m. se realizó el levantamiento de un cadáver en el hospital, por una complicación posoperatoria.
Según la información recabada por el OIJ, la mujer había ingresado al Calderón Guardia a eso de las 10 p. m. Posteriormente, sufrió un paro cardíaco y murió.
La Policía Judicial no tenía ayer detalles sobre el agravamiento que se presentó.
El representante del centro médico tampoco dio más informes al respecto y se limitó a indicar en un correo electrónico que la clínica “siguió todos los protocolos establecidos y en ningún momento se hizo nada que estuviera fuera de nuestros protocolos de salud”. Wachong no admitió consultas personales ni por vía telefónica, sino solo por correo electrónico.
Los agentes judiciales trasladaron el cuerpo de la mujer a la Morgue Judicial, en San Joaquín de Flores de Heredia, para que se le realice la autopsia. Este examen revelará más datos sobre lo ocurrido.
De momento, ni el OIJ ni la Fiscalía habían recibido alguna denuncia sobre esta muerte.
Johana Delgado, hermana de la fallecida, comentó ayer en la tarde que no tenía mucha información sobre lo ocurrido.
Dijo que ignoraba que su hermana se hubiese practicado una cirugía.
Relató que Viviana era ama de casa y a veces laboraba en un negocio familiar.
Muerte anterior. En abril del 2013, una educadora falleció al sufrir complicaciones luego de someterse a una cirugía estética para agrandar sus glúteos.
Maidury Granados Madrigal, de 33 años, murió el 9 de abril de ese año, luego de estar 76 días internada con una infección, en el Hospital San Juan de Dios.
Los médicos le encontraron litro y medio de pus en el glúteo izquierdo. Le amputaron la pierna, pero luego una bacteria contaminó su sangre y falleció.
En ese momento, las autoridades judiciales comenzaron una investigación por una “muerte sospechosa”.
Además, el Hospital San Juan de Dios detalló, entonces, que otros dos casos de pacientes con infecciones en glúteos después de sendas cirugías estéticas, estaban siendo atendidos en centros de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).