Samuel, el pequeño de ocho años que batalló desde el lunes por una bala perdida que se alojó en su corazón, fue declarado en muerte neurológica este martes por la tarde en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Nacional de Niños.
A las 6:10 p. m. Michael Valverde, un tío del pequeño, aseguró a La Nación que Samuel había fallecido. Sin embargo, a las 7:02 p. m. Olga Arguedas, directora del centro médico, aclaró que el niño, lamentablemente, tiene muerte neurológica.
Samuel fue descrito por su abuelita, Ana Borbón, como un chiquillo activo, amante del fútbol. Entre la madrugada del lunes y este martes, fue sometido a cuatro cirugías, una de ellas para extraerle el proyectil.
El grave incidente ocurrió en la madrugada del lunes en barrio La Gloria, en Zapote, muy cerca del redondel de toros de la localidad. Es una barriada de estrato muy humilde, donde en las últimas semanas han ocurrido varios enfrentamientos a balazos, al parecer entre grupos narco.
Durante la mañana de este martes, cuando Samuel seguía luchando por su vida, doña Ana relató que su nieto cursaba tercer grado en una escuela en San Francisco de Dos Ríos. Lo recordó como un niño al que le encantaba jugar, correr e incluso a veces era “hiperactivo”.
“Le fascina jugar fútbol, todavía no está en un equipo porque es muy pequeño pero sí juega con sus hermanos y primos cada vez que puede”, relató Borbón.
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La tarde del lunes, Fuerza Pública y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) realizaron un operativo en la zona y detuvieron a cinco hombres.
El Ministerio de Seguridad Pública (MSP) confirmó este martes que a los sujetos se les tomaron los datos personales y las huellas dactilares para que quedaran identificados y reseñados y luego quedaron libres. De momento no se han identificado personas asociadas directamente con el tiroteo.
Una zona en conflicto
En la barriada destacan dos accesos por calle principal, uno con rampa y otro con decenas de gradas que llevan a las viviendas que están pegadas unas a otras, la mayoría construidas con latas de zinc y madera.
La noche en que ocurrió la tragedia ya todos en la casa de Samuel estaban dormidos cuando comenzaron a sonar los disparos y como su nieto viven una casa de dos pisos y duerme en la segunda planta, fue ahí por donde ingresó la bala. “Estaba durmiendo con el hermano de 11 años y fue cuando la bala lo impactó”, añadió doña Ana.
Lugareños y vecinos temerosos, quienes hablaron en identidad protegida, concuerdan en que las disputas por drogas son frecuentes en el lugar y desde la vía pública o a pocos metros de las casas disparan los grupos rivales, que se pelean territorios entre el río María Aguilar y La Gloria.
Al parecer eso fue lo que habría ocurrido el pasado lunes, cuando uno de las bandas disparó con una pistola de grueso calibre y la otra agrupación respondió.
Samuel es el menor de cuatro hermanos de 17, 14 y 11 años. Luego de la emergencia fue trasladado rápidamente al Hospital Calderón Guardia donde recibió una operación y posteriormente al Hospital de Niños donde fue sometido a tres intervenciones quirúrgicas adicionales.
En una de esas operaciones le sacaron por un costado de la ingle, la bala de una aparente AK-47 que pasó por varios órganos y se alojó en el corazón, de acuerdo con declaraciones del padre del niño a Telenoticias.
El progenitor añadió al medio televisivo que el proyectil ingresó por la segunda planta de la casa, atravesó la pared y rozó el borde de la cama para luego incrustarse en el pecho del niño. El uso de armas de grueso calibre, como una AK-47 está prohibido entre la población civil. No obstante, los grupos delincuenciales utilizan con mucha frecuencia este tipo de armamento.
Nota del editor: Por un error involuntario, a las 6:10 p. m. Michael Valverde, un tío del pequeño, aseguró a La Nación que Samuel había fallecido. Sin embargo, a las 7:02 p. m. Olga Arguedas, directora del centro médico, aclaró que el niño, lamentablemente, tiene muerte neurológica.