Una perra que caminaba en San Antonio de Escazú con un brazo humano en el hocico alertó a las autoridades de un posible crimen.
La denuncia del caso la hicieron los vecinos de barrio Bebedero, quienes vieron al animal a eso de las 11:19 a. m. cuando caminaba con los restos humanos 400 metros al oeste de la iglesia de la localidad.
Pocos minutos después, efectivos de la Fuerza Pública confirmaron que se trataba del brazo izquierdo de una persona. Estaba en un charral, donde lo habría dejado la perra, cuyo paradero y raza se desconoce.
A 100 metros del punto donde apareció el brazo, perros entrenados de la Unidad Canina hallaron un tronco, que por la vestimenta aparenta ser de una mujer, indicó a las 3:40 p. m. el Ministerio de Seguridad Pública (MSP).
Minutos después, a unos metros de donde apareció el tronco, los efectivos hallaron ambas piernas.
Trascendió que el brazo hallado tiene dos tatuajes, lo que podría ayudar a identificar a la víctima. Además el tronco tenía el vestido de una mujer.
De momento falta por ubicar el otro brazo y la cabeza, por lo que expertos del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Fuerza Pública y perros entrenados continuarán la búsqueda.