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La Policía Municipal de Montes de Oca también ha enfrentado dificultades para intervenir en las continuas megafiestas que se realizan en recintos privados de su cantón en medio de la pandemia.
Sin embargo, con el fin de superar dichos obstáculos, la autoridad ha optado por desarrollar una estrategia más robusta y articulada para detener dichos eventos ilegales: armar casos con bastantes pruebas.
Aarón Mora, jefe de la Policía Municipal de ese cantón josefino, explicó a La Nación que su propósito es recolectar suficiente evidencia para agilizar los trámites requeridos sin violentar derechos civiles.
“Lo que estamos haciendo es presentar los informes que correspondan con toda la evidencia de notificaciones, actas, videos y fotos que generamos en estos lugares, para que el Ministerio Público tenga prueba suficiente y poder sustentar un allanamiento”, detalló el oficial.
Mora afirmó que ya tienen identificados los lugares donde se realizan las fiestas clandestinas, pero que ha sido difícil clausurarlos por la imposibilidad de ingresar a los inmuebles.
Dijo que cuando han intentado gestionar el trámite con la Fiscalía, les han respondido que necesitan elementos de prueba suficientes para poder armar el caso y presentarle al juez la solicitud de allanamiento.
“Aquí la parte más compleja es tener toda la prueba, pero ya lo hemos ido cumpliendo. Montes de Oca tiene un centro de monitoreo que cuenta con 120 cámaras distribuidas en los cuatro distritos y eso nos ha permitido también generar evidencia de estos casos y sumar a lo que el Ministerio Público requiere.
“También tenemos evidencia de cuándo llega la gente, cómo llegan y cuándo se van, los horarios de salida. Toda esta dinámica de los eventos ha quedado registrada en los videos, los cuales eventualmente serán aportados como prueba para que sean evaluados”, subrayó el jefe policial.
Mora indicó que incluso han captado imágenes de cuando estos recintos son abastecidos con cajas de cervezas y demás bebidas alcohólicas.
También manifestó que han identificado que los organizadores de las fiestas utilizan materiales plásticos y otros recursos para cubrir las zonas de acceso y que no se logre ver lo que ocurre dentro del inmueble.
“Hay que dejar claro que la Fiscalía es la que tipifica y acusa. El Gobierno Local solamente eleva la denuncia”, enfatizó la oficina de prensa de la Municipalidad de Montes de Oca, en referencia a las acciones que está tomando para intervenir las actividades clandestinas.
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Sin patentes
Otra preocupación del oficial Mora es que han notado que muchos de estos eventos irregulares se realizan en establecimientos que anteriormente funcionaban como bares y que son conocidos por la población.
“Tenemos algunos locales que en algún momento han tenido patente, pero la quitan y entonces ya dejan de ser locales comerciales y pasan a ser recintos privados. Entonces ahí es donde ya tenemos que actuar con el Ministerio Público y el Ministerio de Salud”, comentó.
De hecho, el pasado viernes 16 de abril la Policía Municipal de Montes de Oca logró intervenir una megafiesta que tuvo lugar en un local que cumplía con estas características.
La encargada de comunicación de la Municipalidad local, María Montero, confirmó que el evento se realizó en San Pedro y que el responsable de la actividad ya fue notificado.
“La fiesta sí fue identificada y nosotros procedimos. No podemos darle el nombre del local en este momento porque hay un proceso administrativo abierto, pero sí podemos confirmar que ya fue clausurado”, indicó.
Según la publicidad que se hizo de esta fiesta ilegal en redes sociales, la misma habría sido promocionada por el negocio “The Living Room”, el cual anteriormente ha realizado eventos de este tipo, en los que se incumplen los protocolos para prevenir la covid-19.
Incumplimiento de medidas
El Ministerio de Salud comunicó este jueves que desde hace varias semanas se han intensificado al máximo los operativos policiales para cerrar locales que incumplen las restricciones sanitarias.
La Nación publicó este miércoles que otro problema que se está presentando en estos lugares es la gran aglomeración de personas que hacen fila para ingresar al local o se quedan ingiriendo bebidas en las afueras.
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Precisamente, dicha situación también sucede en Montes de Oca.
“Efectivamente nosotros tenemos algunos puntos complicados que sí aglomeran gran cantidad de personas por las actividades que se realizan”, respondió Aarón Mora cuando se le preguntó por el ambiente en los alrededores de los bares de la calle 3, conocida como La Calle de la Amargura.
