EscucharLa Policía de Fronteras interceptó un vehículo que transportaba 176.800 cigarrillos de contrabando, equivalentes a ¢8,5 millones, en Guaycará, Golfito, Puntarenas, la mañana del martes. De acuerdo con las autoridades, el decomiso se produjo durante un operativo en La Julieta, sobre la carretera Interamericana Sur.
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Al notar que el carro procedía de la frontera con Panamá y que transportaba numerosas cajas, los oficiales le indicaron al conductor que se detuviera; sin embargo, siguió con su camino.
“Al intentar evadir la intervención policial, realizó una maniobra peligrosa que estuvo a punto de causar el atropello de los oficiales actuantes. Para su sorpresa, más adelante estaba una patrulla, cuyos oficiales lograron detenerlo para así realizar una revisión preliminar de la carga que llevaba”, explicó el Ministerio de Seguridad Pública (MSP).
La Policía identificó al sujeto con el apellido Pérez y aseguró que tiene antecedentes por este tipo de faltas. De hecho, el 31 de octubre del 2021 fue detenido por contrabandear 100.000 cigarrillos y 228 licores. De acuerdo con la Policía, el sujeto no tenía los documentos que probaran el pago de los impuestos del tabaco, ni los permisos para importarlo, por lo que los paquetes y el vehículo quedaron a disposición de la Policía de Control Fiscal.
Tras el decomiso Pérez fue puesto en libertad, pero el caso quedó a cargo de la Fiscalía de Golfito, para el trámite correspondiente.
Contrabandos recurrentes
Desde la zona sur son constantes los decomisos de productos contrabandeados. Los productos que más se movilizan sin las facturas respectivas son cigarrillos, bebidas alcohólicas, medicamentos y distintos tipos de mercadería como utensilios de cuidado personal.
Por lo general, los contrabandistas utilizan automóviles y camiones para ocultar las mercancías en la cajuela y cabina con bolsas o mantas, dobles forros y hasta pisos o paredes que esconden los cargamentos. Además, los involucrados tratan de justificar las cargas con facturas falsas o diciendo que lleva 100 botellas y quizá son muchas más.
Además, también se intentan evadir retenes y algunos conductores viajan por caminos informales con tal de llegar con la carga y distruibuirla en el Valle Central.
