Un paramédico de la Cruz Roja renunció a su puesto luego de que el martes declaró fallecida, por error, a una mujer hallada dentro de una casa en Guachipelín de Escazú.
Cuando los oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) procedían a recoger el cuerpo para llevarlo dentro de una bolsa a la Morgue Judicial, en Heredia, la señora, de 70 años y de apellido Angulo, comenzó a moverse.
Los agentes alertaron de inmediato a la Cruz Roja de Escazú, que trasladaron a la paciente en una ambulancia hasta el hospital San Juan de Dios, en San José.
En ese hospital informaron que la mujer falleció ayer a las 6:30 a. m. en la sección de Emergencias, al parecer por causas naturales.
Ella vivía en una casa alquilada en la urbanización Miravalles, adonde la Cruz Roja llegó inicialmente al recibir el reporte, vía 911, de una mujer fallecida. Era aproximadamente la 1:45 p. m.
Carlos Jiménez Salazar, jefe de la Fuerza Pública de Escazú, afirmó ayer que dentro de la casa se sentía un olor muy desagradable.
“La alerta indicaba que la mujer tenía varios días muerta. En el momento en que los agentes judiciales iban a levantar el cuerpo parece que revivió”, manifestó Jiménez.
El paramédico tenía alrededor de 20 años de trabajar para la Cruz Roja y dimitió al cargo horas después del hecho, dijo la entidad.
Freddy Román, vocero de la Cruz Roja, aseguró ayer que el caso es investigado por el Área de Procesos de Investigación y por iniciativa directa; no por alguna denuncia de la familia de la adulta mayor.
“La investigación es para conocer si hubo alguna anomalía por parte del paramédico. Se van a revisar las boletas de atención y del comité de Escazú. Al parecer valoró la escena y la reportó como fallecida. Se analizan los procedimientos aplicados”, afirmó Román.