Limón. La esposa y la hija del estadounidense Robert Curtis Cohen, asesinado el 9 de marzo del 2005 en Limón, atribuyeron ayer el homicidio a la pérdida de $12 millones (¢6.200 millones) en inversiones que el hombre supuestamente hizo en el país.
La afirmación la hicieron al declarar, mediante el sistema de videoconferencia (imagen y voz) desde el consulado de Costa Rica en Miami, Estados Unidos, en el debate que se realiza en Limón.
Como presuntos responsables de los delitos de homicidio calificado y privación de libertad agravada figuran el foráneo Luis Alonso Douglas Mejía y la costarricense Anabel Chacón Sánchez, vecina de Limón.
Susana Cohen, la esposa, y Anicha Lee Cohen, hija de Cohen , reiteraron que no vinieron a Costa Rica a testificar porque sienten temor. “No solo la pareja acusada está relacionada con el homicidio, sino que hay otros responsables del crimen que no están detenidos”, aseveraron.
Consultadas por el presidente del Tribunal de Juicio de Limón, Wilberth Montenegro Reyes, si conocían quiénes podrían ser esas personas, dijeron que sí.
Mencionaron a un costarricense (que la fiscalía usó como testigo en el debate), a un sicario prófugo que ella identificó como de apellido Oppenhaimer y a otro estadounidense apellidado Bresko como los otros responsables.
Con los relatos de las mujeres terminó ayer la recepción de testimonios en este juicio que empezó el pasado 9 de abril.
Inversionista. Robert Curtis Cohen, de 63 años, era un contador que recibía dinero de inversionistas estadounidenses para adquirir propiedades en el país.
Cohen tenía negocios aquí desde la década de los años 80, de acuerdo con lo que se conoció ayer en el debate.
Cohen, con el apoyo de un abogado tico –fallecido en octubre del 2004–, crearon un conjunto de sociedades con las cuales adquirieron propiedades.
Anicha Lee Cohen reveló ayer que su padre le comentó que tras la muerte del abogado se dio cuenta que $12 millones que tenían invertidos en propiedades se perdieron. Por razones desconocidas –declaró–, los bienes no estaban inscritos a nombre de las sociedades que ellos constituyeron.
La hija del inversionista estadounidense expresó que una de las personas más molestas con la pérdida del dinero era Bresko, el otro supuesto responsable del homicidio de su padre.
Agregó que este hombre puso en contacto a su padre con Oppenhaimer, a quien se lo presentó como otro inversionista.
Sin embargo, en la investigación se determinó que Oppenhaimer y Alonso Douglas retuvieron a Cohen desde el domingo 5 de marzo cuando salió del hotel Real Intercontinental –en Guachipelín, Escazú, San José– para realizar ejercicios.
El cuerpo de Cohen apareció asesinado el jueves 9 de marzo debajo del puente sobre el río Chirripó, en Matina, Limón
Douglas fue detenido en abril del 2005 por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) cuando viajaba con el vehículo que había rentado Cohen. Meses después capturaron a Anabel Chacón, una vecina de Liverpool, Limón, porque supuestamente facilitó la casa para mantener allí al inversionista.
En este caso han declarado 13 testigos. Las conclusiones se espera que empiecen mañana.
Ayer, el defensor, Santiago Araya, pidió al tribunal anular la declaración por videoconferencia.