El traductor de la Lengua de Señas Costarricense (LESCO), diseñado por investigadores del Instituto Tecnológico de Costa Rica (ITCR), tuvo su primera prueba de fuego este fin de semana, al ser validado por la comunidad sorda del país.
La Señatón, como se le llamó a la actividad, tuvo lugar el sábado en el auditorio del Museo de Jade, en San José.
Para validar la herramienta, las personas sordas se dividieron en 70 parejas que competían entre sí, para dar un sentido lúdico a la actividad. Los tres equipos que consiguieran validar la mayor cantidad de señas recibirían premios.
Más allá del juego, sus observaciones permitirán a los investigadores ajustar el prototipo, que consiste en un software que cuenta con un avatar (figura animada), el cual traduce las palabras del español al LESCO.
Las señas son reconocidas por el traductor y reproducidas por el avatar, cuyo diseño representa a una mujer y hombre adultos, así como a un niño y a una niña.
Actualmente, el prototipo cuenta con una base de datos que alcanza las 1.284 señas. De ese total, 20 señas ya están validadas y otras 350 fueron evaluadas durante la Señatón.
Cuando el traductor no reconoce una palabra, porque no está incluida en su base de datos, entonces procede a deletrearla utilizando señas.
Traductor. Desde 2015, el ITCR trabaja en este traductor, el cual pretende ayudar a disminuir la brecha de comunicación entre sordos y oyentes.
Con ello, se busca evitar la exclusión social de los primeros y garantizarles acceso a servicios de educación, salud, legales y financieros, entre otros.
“Además, estará accesible a todo el sector privado que desee adecuar sus plataformas informativas y de servicios a esta población”, destacó el ITCR en un comunicado.
En esta primera etapa, el prototipo traduce las palabras del español a la lengua de señas costarricense.
Sin embargo, y en una segunda etapa, el traductor espera realizar el proceso a la inversa: traducir del LESCO al español.
El LESCO es la lengua oficial de la comunidad sorda en el país. Consiste en un conjunto de gestos corporales, cuya gramática es entendida por los usuarios.
Aunque nació en 1970, la gramática se oficializa hasta el año 2013. Actualmente, el LESCO cuenta con 1.284 señas.