Los vecinos de San José en lugares como Montes de Oca, Curridabat, Barrio Escalante, Santa Ana y Escazú podrán saltarse las presas con ayuda de una bicicleta eléctrica, a partir del próximo martes 15 de octubre.
A partir de esa fecha y mediante la aplicación móvil llamada OMNi, los interesados podrán alquilar una bicicleta y desplazarse hacia sus destinos.
Esa app estará disponible desde el jueves 10 de octubre para descarga, tanto para dispositivos Android como iOS.
El nombre del servicio es OMNiBicis y la idea es que las personas puedan rentar ese medio de transporte alternativo por un tiempo ilimitado; el costo de la hora será ¢ 600, aunque también ofrecerán paquetes para rentar hasta por un año.
El servicio funciona por medio de pago electrónico, por lo que quien lo utilice deberá asociar una tarjeta bancaria a la aplicación. Aunque según explicó Nayid Aguilar, director general de OMNi, también se habilitarán 3.500 puntos de recarga en efectivo.
Aguilar añadió que la intención de la empresa “es aportar a la salud, al medio ambiente y además, aprovechar el transporte de una manera segura y eficiente”.
Las bicicletas que utiliza OMNI son de pedal asistido y ofrecen una autonomía de 100 kilómetros aproximadamente.
¿Pero qué comodidades le brindará este medio de transporte? En las bicicletas se podrá ajustar la altura del asiento y además, esos vehículos tendrán un soporte para el teléfono celular en caso de que se necesite utilizar Waze o Google Maps y un puerto USB para cargar los dispositivos.
Así mismo, tendrán luces que se activarán automáticamente cuando ya no se percibe la luz natural.
Inclusive, estos medios de transportes vienen con portavasos y una pantalla LCD que muestra el porcentaje de batería —de manganeso de litio—, además de un indicador de distancia y velocidad de la bicicleta eléctrica.
En el alquiler no se incluye el casco, aunque la compañía aseguró que motivarán a sus usuarios a portarlos.
En cuanto a las ruedas de estas bicicletas, la compañía OMNi aseguró que son producidas en una sola pieza, “lo que reduce los daños, y evita el estrés al cliente de tener que cambiar una llanta”.
¿Cómo funcionará?
Una vez que la persona asocie su tarjeta al servicio podrá alquilar la bicicleta donde la encuentre (dentro de los lugares establecidos para su funcionamiento: Montes de Oca, Curridabat, Barrio Escalante, Santa Ana y Escazú).
El usuario deberá acercarse a la bicicleta que estará conectada a Internet las 24 horas del día y cuenta con una tarjeta SIM.
Este medio de transporte alternativo se desbloquea a través de la aplicación y cuando la bicicleta no esté en uso, sus llantas traseras estarán bloqueadas.
“Usamos bicicletas de quinta generación, no tenemos estaciones, la bicicleta se fijan con una patilla”, explicó Aguilar.
La ubicación de los vehículos será monitoreada por GPS, con el objetivo de establecer zonas límites (geo cercas) en donde puede utilizarse.
Para evitar que las personas que desean usar el servicio se queden sin bicicleta, la compañía promete que tendrá unos camiones que les permitirán transportar las bicicletas, para abastecer los puntos que así lo requieran.
El servicio comenzará con 1.000 bicicletas y se espera que para final de año se cuente con cerca de 5.000.
En caso de que algún usuario en carretera tenga algún inconveniente, la empresa se prepara para atenderlo con un número de servicio al cliente, una cuenta de correo y un chat en vivo para consultas, explicó Nayid Aguilar.
“Es un proyecto que viene ayudar al país y a las personas, no solo en la descarbonización, sino ayudar a las personas en las calles.¿Por qué en Costa Rica?, porque en toda Centroamérica, tiene condiciones en anchos de banda, velocidades, cantidad de gente con acceso a líneas telefónicas que se compara con las primeras economías del mundo”, comentó Aguilar.
Él aclaró que a futuro planean enviar otros servicios, como un monedero electrónico hasta una aplicación para los taxistas con el fin de poderlos conectar.
En el 2016, la Municipalidad de Cartago inició un proyecto llamado Bicipública, en el que prestaba bicicletas a los vecinos de la provincia, para que pudieran circular por la Vieja Metrópoli.