Viajar al futuro y consultar cómo se verá dentro de unos años, cuando sea un adulto mayor, es una tentación a la que muchos ya han sucumbido con la aplicación Face App.
Mientras algunos lo ven como un inocente acto para entretenerse, otros señalan que quienes utilizan la aplicación— disponible tanto para teléfonos con el sistema operativo Android, como iOS— están permitiendo que sus datos se usen para entrenar a la Inteligencia Artificial en el reconocimiento de rostros.
Face App no es nueva, es una aplicación desarrollada por una empresa rusa y es una app que en el 2017 adquirió notoriedad. Sin embargo ha regresado a la vida, de eso dan cuenta las numerosas publicaciones de sus contactos en plataformas como Facebook y otras.
Las condiciones del servicio son las que han levantado las alarmas de los defensores de la privacidad, pues las reglas del juego que establece Face App son un poco ambiguas.
Primero, le asegura al usuario que no alquilará, ni venderá su información a nadie fuera de Face App, pero inmediatamente asegura que podrán: “compartir el contenido del usuario y su información (que incluye, entre otros datos, cookies, archivos de registro, identificadores de dispositivos, datos de ubicación y datos de uso) con empresas que formen parte legalmente del mismo grupo de FaceApp”.
Asimismo, en su política se establece que también tendrán la posibilidad de brindar sus datos a proveedores de servicios de la aplicación, quienes: “tendrán acceso a su información cuando sea necesario para proporcionar el servicio bajo términos de confidencialidad razonables”.
Finalmente, al instalar la app y usar el servicio, la persona acepta que esta pueda transferir los datos recopilados, incluida la información personal a través de las fronteras y desde su país o jurisdicción a otros países o jurisdicciones de todo el mundo.
¿Qué opinan los expertos sobre la aplicación?
Eli Fashka, CEO de Soluciones Seguras explica que el riesgo no radica en subir una foto a la aplicación.
“En realidad, no se necesita tomar una foto para modificarla con inteligencia artificial, como hace FaceApp, cualquier usuario puede buscar una fotografía en Google y subirla a Face App. En otras palabras, no estamos exponiendo nuestros datos más de lo que ya lo hacemos en Google o Facebook”.
¿Entonces, de qué cuidarnos especialmente? Luis Lubeck, experto en seguridad informática de ESET Latinoamérica aseguró que una de las precauciones que se deben tomar es conocer hacia dónde van los datos.
“Leer cuál servicio estamos habilitando, qué permiso estamos dando a la app en nuestro dispositivo, analizar los permisos que nos solicitan son coherentes, hay apps que terminan pidiendo ubicación y acceso a los contactos, no solo a la carpeta multimedia, sino la cámara, que a veces nos pueden exponer un poco más”, dijo Lubeck.
Además, dijo que no deberíamos confiar únicamente en el servicio que nos brinda la empresa que desarrolló la app. “No nos olvidemos de Cambridge Analytica, que por medio de una app que parecía una encuesta sociodemográfica, terminaron entregando datos para otras cosas”, agregó.
Siempre el usuario debe de estar prevenido de que al entregar datos a una aplicación estos pueden verse eventualmente expuestos, concluyó el experto.