New York Times
La red social Twitter puede parecer sencilla, pero no lo es, y su complejidad ha desalentado a muchas personas que han probado el servicio. Lo cual es un problema porque una de las grandes interrogantes a las que se enfrenta Twitter antes de cotizar en bolsa es si puede atraer suficientes usuarios para convertirse en una empresa robusta para los dólares de la publicidad. Aunque recauda dinero por ese concepto, todavía no vende anuncios suficientes para tener ganancias.
No obstante, en los pocos años desde su inicio, Twitter ha conseguido usuarios rápidamente. Gente y organizaciones de todo tipo – celebridades como Justin Bieber, marcas como Oreo, hasta el economista Jeffrey Sachs – han entrado en Twitter para compartir información e ideas. En un folleto para inversionistas dado a conocer hace poco, la compañía dice que los usuarios mensuales en todo el mundo aumentaron a 232 millones en el tercer trimestre, en comparación con casi 200 millones a principios de año.
Según una encuesta de opinión de Pew, el porcentaje de usuarios estadounidenses de internet que estaban en Twitter hasta mayo fue de 18 por ciento, más del doble del de noviembre de 2010. Sin embargo, esas cantidades no tienen nada que ver con los de Facebook, un rival de primera. Esta empresa tiene más de mil millones de usuarios y, según la encuesta de Pew, hasta finales del año pasado, 67 por ciento de los usuarios estadounidenses de internet utilizaba Facebook. ¿Se convertirá Twitter en una plataforma que usen las masas? Quizá la mejor forma de responder a esa pregunta es usar uno mismo el servicio.
A continuación, va lo básico. ABRIR UNA CUENTA. Inscribirse en Twitter es sencillo. Sólo escoja un nombre de usuario, que se conoce como “handle”, y una contraseña. La mayoría de las personas trata de usar su nombre o una variación como su “handle”, como @BillGates. Trate de que sea corto. No es deseable que ocupe muchos de los 160 caracteres si alguien lo menciona en un tuiteo. Después, dele cierta noción a otros usuarios de quién es usted. La gente que no lo conoce, pero le interesan sus “feeds” querrá algunas pistas para saber si deberían “seguirlo”, lo que significa que agregaría sus tuiteos a los que ve en su “feed” exclusivo.
A diferencia de Facebook, donde la gente se conecta con amistades y familiares, en Twitter, la mayoría de las personas siguen a otras con intereses o profesiones similares. Se puede comenzar agregando una fotografía en el perfil de la cuenta. Una foto de la cara, una caricatura, una imagen del perrito, cualquier cosa es mejor que el huevo por omisión, que grita novato en Twitter. Llene la biografía. Utilice los 160 caracteres que tiene disponibles para explicar quién es y tratar de orientar sobre qué temas va a tuitear.
También puede incluir un vínculo a un sitio web, quizá de la empresa donde trabaja o uno personal. Este es un ejemplo de una buena biografía, la de Laura Seay, una politóloga: “Texana orgullosa. Politóloga del Colegio Colby. Estudio la gobernabilidad con actores no del Estado y la política estadounidense en el centro de Africa. Maine panorámico texasinafrica.blogspot.com”. INTEGRAR UNA COMUNIDAD. Lo siguiente es encontrar personas a las que seguir.
Los tuiteos escritos en las cuentas a las que usted sigue aparecerán en su “feed”, también llamados cronología. Es fácil quedar atiborrado de tuiteos, por lo que hay que ser selectivo en cuanto a las cuentas que se siguen. Es deseable que la cronología se sienta viva con tuiteos inteligentes, interesantes, informativos y entretenidos. Sin embargo, recuerde que “dejar de seguir” también está a un clic de distancia. Decida cuáles son los temas que más le interesan, como futbol americano universitario, política canadiense, restaurantes neoyorquinos y luego busque por nombre a los escritores o comentaristas de esos temas.
También puede buscar por tema o por zona geográfica en https://twitter.com/search-advanced. Una vez que encuentre una cuenta en la que se tuitea regularmente sobre un tema que le apasione, vea a quién se sigue en esa cuenta. Por ejemplo, si es admiradora de Jessica Valenti (@JessicaValenti), una escritora y oradora feminista, puede seguirla y luego descubrir a otros interesados en los problemas de género al revisar su “feed”. Para ver a todos los que sigue una persona, dé clic en el nombre y luego en “Siguiendo”. Una vez que haya encontrado personas a las que seguir, comprométalas. Envíeles un vínculo para un artículo interesante. (Para ahorrar espacio cuando lo haga, use un servicio para acortar direcciones en la web, como Bitl.ly.)
Interactúe con ellas: responda sus tuiteos con “Responder”, mencione los artículos que comparten, muestre que le gusta un tuiteo con el botón “favorito”. Cuando falla todo lo demás, intente un cumplido. APRENDA EL LENGUAJE. Ayuda conocer el lenguaje interno y la etiqueta de Twitter para participar con la gente, que constituye una parte considerable de lo que hace que el servicio sea confuso para los usuarios nuevos. “RT” significa retuitear; se usa cuando se repite lo que dijo alguien más. Si se quiere agregar un comentario, colóquelo antes de RT. Este es un ejemplo de Cory Boker, el senador electo de Nueva Jersey, que retuiteó y agregó un comentario al usuario @LindsCarter el día de las elecciones en octubre: “Lo hice. ¡Y gracias! RT @Kubds-carter: ¡Voté por Cory Booker! ¿Votó hoy?”.
Los profesionales de Twitter corrigen a menudo sus tuiteos con “Vía” o “h/t”, que significa quitarse el sombrero. Son formas de darle crédito a alguien que compartió primero la información. Si se reconoce a otros en la comunidad de Twitter, lo más seguro es que se retorne el favor.
COMPRENDER LOS SÍMBOLOS.
Es frecuente que los usuarios de Twitter agreguen etiquetas, como #Brooklyn o #SuperBowl, para permitir que otros que buscan ese tema encuentren su tuiteo. Funciona bien en casos específicos; en actividades como conferencias profesionales, por ejemplo, cuando usted quiere saber lo dicen otros sobre el panel.
Sin embargo, las etiquetas, si bien son buena idea, con frecuencia parecen demasiado #2012. Se han usado en demasía y no son tan útiles para buscar. Los seguidores de las etiquetas no estarán de acuerdo, pero mi consejo es: hay que usarlas con moderación. Una importante regla técnica rige el uso del símbolo “@”, que es el inicio del “handle” de cada cuenta.
Si se empieza un tuiteo para alguien con “@”, sólo esa persona y quienes la siguen tanto a ella como a usted lo verán. Ello es para que pueda sostener una conversación semiprivada con esa persona sin abarrotar la cronología de otras personas. Para que el tuiteo aparezca en la cronología de todos los que lo siguen a usted, agregue una palabra o un carácter antes del signo “@”, aunque sólo sea un punto. Este es un ejemplo de Dan Nowicki, un reportero de The Arizona Republic: “.@JohnMcCaien dice a críticos que inmigrantes ocupan empleos que no quieren estadounidenses. 'El inmigrante siempre agarra lo de hasta abajo’, dice McCain”.
TUITEE COMO PERSONA.
Muchas personas se unen a Twitter y creen que se supone que de pronto deban empezar a escribir breves estallidos de palabras apenas hiladas. ¿Quién necesita pronombres o concordancia entre el sujeto y el verbo? ¡Se trata de Twitter! Twitter sigue siendo una conversación, y es deseable que se haga entender. Escriba como habla. Permita que sus tuiteos fluyan como oraciones. Y permita que salga su carácter.
ORGANICE SU “FEED”.
Una de las mejores formas de organizar la locura que puede convertirse Twitter es usando la herramienta de listas de la plataforma. Cree distintas listas con base en sus intereses, y luego agregue personas. A las 9 a.m. cuando quiere noticias, puede jalar la lista de medios y ver lo que están tuiteando sus agencias de noticias y periodistas preferidos. A las 5 p.m. de un viernes, jale la de entretenimiento para ver planes para el fin de semana.
DIGALE A OTROS.
Y, finalmente, la mejor forma de integrar su comunidad es diciéndole a la gente que está en Twitter. Agregue su “handle” a su tarjeta de presentación, su firma de correo electrónico y, cuando sea posible, al final de su correspondencia, algo como: Sígame en Twitter @HannaIngber.