Escuchar
Las desarrolladoras de videojuegos Pocketpair y Krafton firmaron un acuerdo de licencia para los derechos de la propiedad intelectual de Palworld con el objetivo de lanzar una nueva versión del juego para dispositivos móviles.
Palworld es un juego de acción y aventura en un mundo abierto repleto de criaturas llamadas ‘Pals’. El título combina el uso de armas y la creación de objetos en un entorno de supervivencia. La desarrolladora Pocketpair lo presentó durante el Tokyo Game Show del año pasado, y, tras su acceso anticipado en enero de 2024 para PC, logró gran popularidad en un breve período.
El videojuego alcanzó la impresionante cifra de 15 millones de copias vendidas en Steam solo en el mes de su lanzamiento, y llegó a ser el tercer juego con más usuarios conectados simultáneamente en la historia de la plataforma, con 2,1 millones de jugadores.
LEA MÁS: Nintendo y Pokémon demandan a ‘Palworld’ por infringir patentes
La semana pasada, Pocketpair anunció que Palworld también estará disponible en consolas PlayStation 5 a nivel global. Además, la empresa confirmó una colaboración con Krafton, creadores de PUBG: Battlegrounds, para llevar el título a dispositivos móviles.
Krafton informó a través de su blog oficial que firmó un acuerdo de licencia con Pocketpair para extender la propiedad intelectual de Palworld a plataformas móviles. El estudio responsable de desarrollar esta versión será PUBG Studios, el equipo creativo detrás de PUBG.
El anuncio llega tras una demanda interpuesta por Nintendo y The Pokémon Company contra Pocketpair, acusándola de infringir patentes por las similitudes entre Palworld y la saga Pokémon. Entre los puntos destacados de la demanda, se menciona que el diseño de algunos ‘Pals’ es muy similar a ciertos Pokémon. Esta controversia llevó a que algunos jugadores describieran el juego como “el Pokémon con pistolas”.
A pesar de la demanda, Pocketpair afirmó que desconoce las patentes específicas por las que se le acusa y reafirmó que seguirá adelante con el desarrollo de Palworld.
*La creación de este contenido contó con la asistencia de inteligencia artificial. La información fue proporcionada y revisada por un periodista para asegurar su precisión. El contenido no se generó automáticamente.
