Ni en el escenario más optimista, las importadoras y los fabricantes de bicicletas contemplaron que, después de Semana Santa, empezaría ‘su diciembre’.
Las ventas de bicicletas se dispararon hasta en un 100% desde mediados de abril, en unos números solo comparables con los de fin de año, aunque, dependiendo de la empresa, incluso son mejores en estos tiempos de pandemia.
El interés por adquirir una bici es tal, que las empresas consultadas reconocen que en un momento no alcanzó la producción para abastecer toda la demanda.
Pero, ¿cómo se puede explicar el 'boom' del ciclismo recreativo en tiempos de pandemia y qué tipo de clientes son los que están adquiriendo las bicicletas?
La gerente de mercadeo de Cobicondor, Casandra Cruz, una compañía que importa la marca Giant y LIV y fabrica las bicis Condor, reconoce que todo comenzó cuando se juntaron tres factores al mismo tiempo:
1. El cierre de los gimnasios y las limitantes para practicar deportes colectivos hizo que muchas personas se inclinaran por el ciclismo como su nueva actividad para mantenerse en forma.
2. El temor de un buen número de personas por utilizar el transporte público y exponerse a los aglomeraciones, en medio de la crisis de la covid-19. Esto hizo que prefirieran trasladarse en bici de un lugar a otro, que subirse a un autobús.
Sumado a la reestricción de placas para vehículos, que obliga a buscar medios alternativos para trasladarse a su trabajo.
3. Los ciclos de todo el país estuvieron abiertos la mayoría del tiempo. Es decir, las medidas sanitarias los golpearon mucho menos que a otros comercios.
El gerente de Innova Bike, Víctor Bolaños, distribuidora de las marcas Pinarello, Orbea y Look, agrega dos puntos adicionales.
El primero, el anhelo de las personas por compartir con otras.
En medio del encierro que exige la pandemia, los deportistas encontraron en el ciclismo una forma de verse con sus amigos, tener una tertulia y disfrutar al aire libre, aunque claro está, deben evitar aglomerarse y guardar distancia.
También cree que, de alguna manera, favoreció el impulso del Gobierno, pues desde el principio de la pandemia, se le sugirió a las personas movilizarse en bici.
En medio de tantas razones, el ciclismo acaparó a un buen número de nuevos practicantes en los últimos meses. En Cobicondor se llegan a distribuir casi 400 bicicletas por día durante el mes de diciembre, el mejor del año.
Son los mismos números que manejan en este momento, con las dificultades que esto conlleva. Por ejemplo, empezaron a sufrir retrasos en la llegada de las bicicletas importadas de Asia desde meses atrás, consecuencia de la pandemia.
Otro inconveniente fue que, a principios de este año, pensaron que se vendría una crisis fuerte, pues las bicicletas y toda la indumentaria relacionada (cascos, zapatos, uniformes, etc) no se percibe como un gasto normal de la canasta básica.
Esto provocó que decidieran disminuir el stock de productos por un tiempo. Sin embargo, de un momento a otro, empezaron a subir las ventas de forma sorpresiva.
"Teníamos un stock muy reducido y la gente empezó a pedir todos los días. No sé cuántas bicis hemos dejado de vender por esto. Nadie tenía una bolita de cristal para imaginar que algo así podía pasar", comentó Cruz.
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Lo más pedido. En el caso de Cobicondor, las bicicletas más solicitadas son las que se encuentran en un rango de precio entre los ₡130.000 y los ₡300.000, la gama más baja.
Mientras que, en el caso de Innova Bike, las que más se venden cuestan entre ₡350.000 y ₡400.000, que también es el rubro de precios más cómodo entre las marcas de la compañía.
Chacón explicó que muchos de los clientes se interesan inicialmente en comprar una bicicleta que se encuentre en este rango de precio, pero luego se animan a adquirir un producto más oneroso
Esto ha provocado que también se incrementen las ventas de las bicicletas que tienen un valor cercano a los ₡360.000, el segundo rubro más alto.
"En mayo fue el repunte más agresivo, fue más que una navidad, fue como una navidad duplicada", resaltó Chacón.
Cruz explicó que en Cobicondor sucedió algo similar, pues trajeron un porcentaje de mercadería que se consideraba de consumo anual, pues cada bicicleta ronda entre los ₡1,5 millones y los ₡3 millones.
Sin embargo, todo el producto se acabó en cinco días.
De igual forma, la venta de los cascos más cómodos se incrementó en casi un 60% y la de los zapatos en un 70%, desde mediados de abril hasta el día de hoy.
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Consecuencias paralelas. El alza sustancial de ciclistas podría tener dos consecuencias en los próximos meses.
El periodista especializado, Steven Mora, fundador del sitio crciclismo.com, explicó que, en las últimas semanas, ha notado un incremento en los accidentes de los ciclistas.
Primero, por la falta de infraestructura y de ciclovías, aunado al aumento de novatos que todavía no conocen todas las reglas que deben seguir.
También, la falta de cultura y conocimiento de muchos choferes, que suelen volverse agresivos cuando miran a un ciclista a un costado de la carretera.
"Se ha convertido en una lucha del fuerte contra el débil. El fuerte es el carro, el débil el ciclista. El país tiene que abrirle ese espacio a la bicicleta", explicó Mora.
Por otro lado, la posibilidad de que un porcentaje de estos deportistas entusiastas decida incursionar de manera más intensa le abre la posibilidad a la Federación Costarricense de Ciclismo para que pueda trabajar en visorías y tratar de masificar.
Mora daba el ejemplo de una pareja de padres que se mete de lleno en el ciclismo y se enamora de la disciplina; es probable que luego decida impulsar a su hijo para que trate de practicar el mismo deporte, lo que al final abriría la puerta a nuevos talentos que se podrían aprovechar.