El telón de cierre de la cuarta edición del Mercedes-Benz Fashion Week San José cayó la noche de este sábado.
Con la participación de los nacionales Rob Chamaeleo y Óscar Hernández, con su marca Toribio, y las pasarelas internacionales Pink Filosofy (Colombia), Alfredo Martínez (México), el indio Bibhu Mohapatra y las marcas comerciales Lu by Lolita y Arturo Calle, la semana de la moda capitalina clausuró su dosis de diseño, textiles y creatividad.
Desde tierras colombianas llegó una propuesta de ropa casual femenina gracias al talento de las suramericanas Adriana Arboleda y Johanna Ortiz. Sus tratrabajos mostraron mucha frescura y diversión con estampados florales y modelos de inspiración oriental.
Los nacionales supieron darse su lugar en el gran adiós de estas pasarelas. El jovencísimo Rob Chamaeleo supo sorprender al público con su propuesta, titulada Chapuí .
Su colección, con muchos tonos de oscuridad, algo que lo ha identificado durante su carrera, expresó una obra que buscó ser etérea, pero contundente, en la utilización de el negro, combinado con tonos mucho más vivos como el magenta, cian, azul rey, morado y el verde lima.
En sus 24 outifts , el diseñador presentó impresionantes piezas con tendencias sadomasoquistas hechas con látex, cuero, metales, satén japonés y viniles, logrando una mezcla entre lo orgánico e inorgánico en vestidos, chaquetas, sweaters , pantalones y blusas. Algunos, con muchos estampados, rompieron con la tradición del diseñador.
Querido. Para Óscar Hernández, en las piezas de su marca Toribio, la herencia y la familia son muy importantes.
El año pasado lo demostró con un trabajo basado en el campo y, en esta nueva edición, lo hizo con una colección creada a partir de una alforja que su abuelo le heredó a su padre y éste al diseñador.
Ecuestre marca la evolución de Hernández con un concepto claro de funcionalidad, belleza y accesibilidad en las diferentes piezas minimalistas, elaboradas con un impresionante trabajo artesanal hecho a mano.
El trabajo de Toribio, del cual se vieron piezas como chaquetas, bolsos, blusones, salveques y, por supuesto, alforjas, se ganó el visto bueno del público, algo que ya es costumbre en él.
Adiós. La última jornada de este Fashion Week se despidió por todo lo alto gracias al cierre espectacular que estaba pactado de la mano del diseñador de origen indio, pero radicado en Nueva Yor, Bibhu Mohapatra.
Al cierre de esta edición, él estaba por mostrar su trabajo de otoño-invierno 2016, inspirado en las concubinas del imperio chino que ya ha lucido en otros grandes escaparates como la Semana de la Moda de Nueva York.