Dejar lisiado a Batman es quizá su mayor y más dolorosa hazaña.
En la propia Baticueva se gestó lo inédito, Bane se ve cara a cara con el hombre murciélago y en un acto inmisericorde lo ‘parte’ con su rodilla.
Fue un encuentro soñado. En la cárcel de Peña Dura– donde desde muy niño Bane fue encerrado para pagar por los ‘pecados’ de su padre–, el terrorista en potencia veía murciélagos mientras dormía y los relacionaba con el caballero oscuro. Para él, fueron un signo inequívoco.
Fue, precisamente, tras los barrotes donde crecieron los demonios de Bane, el asesino más temido de Ciudad Gótica. Allí se hizo superfuerte, se formó intelectualmente y desarrolló sus variadas habilidades.
Todo bien, sino fuera porque también allí crecieron sus resentimientos y los odios contra el mundo. Esa cárcel era inhumana.
Allí, Bane fue objeto de un experimento que resultó ser caldo de cultivo para sus fechorías. Se le inyectó Venom, una droga que casi lo mata pero que, al fin de cuentas, potenció sus habilidades. Se volvió adicto.
Así, el monstruo fue depurado para la acción. ¡Batman debe cuidarse!
De temer. Colocado en el puesto #34, de los 100 mejores villanos de cómic según el sitio IGN, Bane hace todos los méritos para causar terror.
Para la memoria reciente, en la cinta Batman: The Dark Knight Rises (2012), el cineasta Christopher Nolan nos mostró un Bane (Tom Hardy) robusto, sádico y sin compasión por nadie. También allí puso en aprietos graves al hombre murciélago.
“¿Crees que la oscuridad es tu aliada? Tú simplemente te adaptaste a la oscuridad. Yo nací en ella, moldeado por ella. No vi la luz hasta que ya era un hombre, y por el tiempo en que lo hice fue solo cegadora. Las sombras te traicionan, porque pertenecen a mí”, dijo el Bane de Nolan a Batman.
En los cómics, donde apareció por primera vez en el #1 de Batman: Vengeance of Bane ( 1993), se describe a un Bane como un fino e inteligente terrorista . El plan para que Batman mordiera el polvo no fue fortuito. Lo tenía todo planeado y lo hizo realidad.
Las historietas narran cómo Bane derriba los muros del Manicomio Arkham, permitiendo que El Guasón, Dos Caras, Enigma, el Espantapájaros y varios villanos más se fuguen del asilo y hagan locuras en Gótica.
Será la serie de cómics Knightfall , ( La caída del murciélago , 1993), la que termine por perfilar al poderoso Bane. Por la acción revoltosa de los villanos recién liberados, Batman está agotado y será presa fácil de un Bane que termina por lisiarlo.
Mientras Gótica está sin Batman, el mismo Bane se establece como el rey del crimen. ¿Quién podrá detenerlo? Bueno, Batman está parapléjico, pero no muerto.