Ariel Escalante ha estado fascinado con la niebla desde pequeño. En sus palabras, se trata de algo tan mágico “que es un poema en sí misma”.
Esa obsesión hace que, a sus 38 años, finalmente pueda presentar una historia donde pueda proyectar todos sus pensamientos en torno a este fenómeno. Se trata de Domingo y la niebla (2022), película estrenada en el connotado Festival de Cannes y que finalmente llegó a salas de cine nacionales este 3 de noviembre.
“Me gusta la idea de explorar la niebla como una metáfora del luto”, comenta el cineasta sobre su segundo largometraje, el cual ve la luz seis años después de su debut El sonido de las cosas (2016).
“La niebla es una manifestación del amor que hemos perdido y de nuestra incapacidad para dejarlo ir. También es símbolo de esperanza”, expresa.
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Hipnótica historia
El largometraje cuenta la historia de Domingo, quien vive amenazado por unos matones contratados por un desarrollador inmobiliario. Ellos buscan expulsar a los habitantes del lugar y allanar el camino para la construcción de una megacarretera.
Domingo, un campesino viudo, pronto se encuentra viviendo en un pueblo fantasma, lidiando con el dolor de ver a sus amigos irse uno a uno. Sin embargo, su tierra esconde un secreto: todas las mañanas recibe la visita del fantasma de Marilia, su difunta esposa, que se acerca entre niebla.
El protagonista está decidido a aprovechar esta oportunidad y enmendar sus errores del pasado. Por eso, está seguro de que nunca renunciará a su terreno, aunque para eso tenga que recurrir a la violencia.
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Escalante asegura que este drama intimista tiene grandes intenciones ya que construyó la historia para que reflexione sobre temas como hombres privilegiados, la fragilidad masculina, las relaciones familiares rotas y la culpa.
“Pienso en Domingo y la niebla como una película neorrealista sobre fantasmas”, cuenta Escalante a Viva. “Es una película a la vez personal y política, dolorosamente realista y alegremente imaginativa”, agrega.
La película, protagonizada por Carlos Ureña y Sylvia Sossa, se filmó en Cascajal de Coronado y contó con la participación de la comunidad. La mayoría de actores y actrices secundarios son vecinos de la zona, sin experiencia previa en actuación.
La cinta se estrenó en abril en la prestigiosa sección Una cierta mirada, del Festival de Cannes. Fue el primer filme centroamericano en ser parte de una selección oficial de dicho evento cultural.
Una cierta mirada, por cierto, es una sección de Cannes paralela a la competición por la Palma de Oro.
Previamente, el filme tico Ceniza negra había estado en la sección Semana de la Crítica y la cinta Clara Sola en la Quincena de Realizadores, pero esta es la primera película que está en una de las dos competencias oficiales organizadas por el festival.
El próximo noviembre ‘Domingo y la Niebla’ formará parte de la programación del Festival Internacional de Cine de Cali (FICCALI), en Colombia.
Además, esta es la segunda aventura fílmica de Escalante desde la silla del director. Su ópera prima El sonido de las cosas ganó el Premio Kommersant Weekend Prize en el Festival de Cine de Moscú en el 2016 y se exhibió en más de 30 festivales internacionales de cine como el Mar Del Plata IFF, el Biarritz Amerique Latine y el Havana IFF.
Puede disfrutar de Domingo y la niebla en el cine Magaly y en las salas de Novacinemas y Cinépolis.