Hay películas que están hechas para entretener y otras para reflexionar. A este último grupo pertenece Extraordinario (Wonder, 2017), cinta protagonizada por Jacob Tremblay (La habitación), Owen Wilson y la experimentada Julia Roberts, a sus 50 años.
La película, que se estrenó el jueves en los cines ticos, se basa en la novela Wonder (La lección de August), de la escritora estadounidense R. J. Palacio. Se trata del primer libro de la artista literaria, un éxito en ventas que la lanzó a la fama allá por el 2012.
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Tanto la película y como el libro presentan la historia de August Auggie Pullman, un niño que nació con una deformidad facial: el síndrome de Treacher Collins.
Tras ser operado 27 veces, estar alejado de otros niños y la escuela, sus padres piensan que está preparado para entrar a quinto grado. Como era de esperarse los miedos de enfrentar ese mundo se hacen presentes en la familia.
Curiosidad, rechazo y aceptación se mezclarán en esta historia.
"Sin embargo, Auggie tratará de encajar entre sus nuevos compañeros y profesores, demostrando que pese a su físico es un niño como otro cualquiera", detalla la sinopsis de la película.
August es interpretado por Tremblay, a quien conocimos por su protagónico en la cinta La habitación (2016), mientras que sus padres –Nate e Isabel–, quedaron en manos de Wilson y Roberts respectivamente.
Según dijo Roberts a medios internacionales, el libro la conmovió mucho cuando lo leyó. Incluso compartió el texto con sus hijos.
"Todos experimentamos un enorme cambio vital cuando tenemos un hijo. Te conviertes en la responsable de una vida humana y esa es ahora tu primera y principal prioridad", comentó la intérprete.
"En el caso de Isabel, madre de Auggie, se convirtió en especialmente en su dedicación más absoluta. Para ella que su hijo vaya al colegio tiene un sabor agridulce, pues será la primera vez que no pase con ella cada segundo de la vida", agregó Roberts.
Para la crítica internacional, Extraordinario es una cinta valiosa por rompe los paradigmas de la sensiblería y logra conmover de una forma real.
"Entrañable y nada pretenciosa, como sus personajes principales. Sus lecciones de compasión y aceptación no son sentimentaloides. Su impacto es universal", escribió sobre la cinta The Hollywood Reporter.
La revista Variety refuerza esta idea. "La cinta demuestra que una película que parece sensiblera sobre el pael puede provocar lágrimas honestas".