CIUDAD DE MÉXICO. EL UNIVERSAL. En junio de 1993, después de vivir años de abuso, Lorena Bobbitt no pudo más. Una noche, en su casa en Virginia, Estados Unidos, cortó el pene de su esposo con un cuchillo mientras él dormía.

Su nombre se volvió titular de las noticias de aquella época, pero el suceso a la larga la llevó a dedicar su vida a ayudar a otras personas en situación de violencia.

De aquel día no recuerda mucho. Explica que no fue que tomara la decisión de hacer lo que hizo, sino que no sabe qué pasó con su mente, lo que sí sabe es que estaba destrozada psicológicamente.

“Los psicólogos me analizaron, me dijeron que yo tenía ese síndrome de mujer abusada y psicológicamente no estaba cuerda, mi mente no estaba en los cinco sentidos”, relata a El Universal.

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Consciente de que miles de personas pasan por violencia en el hogar, sobre todo actualmente bajo el confinamiento por el Covid-19, la activista cuenta su historia en la cinta I was Lorena Bobbitt, que se estrena hoy lunes en Estados Unidos en el marco del Día de los caídos.

En el largometraje, Lorena no sólo participó como productora ejecutiva sino también como narradora de la historia, cuyo estreno en México será a través del canal Lifetime con fecha aún por definirse.

“Se trata de educar a las personas, por eso estamos haciendo estas películas, estos documentales, porque son cosas actuales que han pasado”, señala Bobbitt.

Críticas

Ante las críticas que existen alrededor del caso, explica que todo es cuestión de educación y espera que el público, antes de hacer una opinión o juzgarla no solo a ella sino a alguien que ha pasado por una situación de violencia, se informe.

“La educación empieza en la casa, la educación de violencia doméstica tenemos que, nosotros como sociedad, ayudar a educar a las futuras generaciones que vienen detrás de nosotros, a nuestros niños, nuestros jóvenes, por eso yo tengo la Lorena Gallo Foundation, que tiene como misión expandir la educación en contra de la violencia doméstica, intrafamiliar y asalto sexual a nivel escolar, comunitario, informar al público de muchos recursos de ayuda que existen en la actualidad colaborando con la comunidad”.

La activista busca romper el silencio en cuanto a estos temas y considera que es importante como mujer y latina tener una voz fuerte para, por ejemplo, continuar con movimientos como el Me Too.

Explica que su propósito es ser transparente con el público y contar su historia.

“Quiero desestigmatizar ese tabú que hay sobre la violencia doméstica, no solo pasa a mujeres -porque obviamente se trata de un asunto de mujeres- pero también hay hombres y niños que sufren de violencia doméstica”.

I was Lorena Bobbitt es una película que sigue la transformación de Lorena de una novia inmigrante a una esposa maltratada y cómo superó los obstáculos para convertirse en una mujer fuerte que aboga por otras mujeres maltratadas.

El largometraje es protagonizado por Dani Montalvo como Lorena y Luke Humphrey como su pareja John Bobbitt y es dirigido por Danishka Esterhazy, con un guion de Barbara Nance.

“Ver a la actriz que me representó en la pantalla fue algo muy emocional, llegar a esos momentos oscuros de mi vida, pero mentalmente estuve más preparada, yo tenía que seguir, era una de mis decisiones seguir adelante con mi historia”, relata Lorena.

“Quería seguir ayudando a esas personas, específicamente mujeres, que han pasado por maltrato y violencia doméstica y abuso sexual. Es muy importante que mi voz sea escuchada por medio de películas o documentales que he hecho y charlas en la comunidad, por medio de mi fundación también”, dice.