Es un amante de la alabanza y tal parece que de su público también. Celebrando sus 25 años de carrera musical, Marcos Witt se entregó por completo en el Palacio de los Deportes y ofreció un recital adornado con sus mejores joyas.
Witt es genio y figura, voz y encanto, y el viernes por la noche lo demostró desde el principio y lo mantuvo hasta el final. A las 8:30 p. m, el cantante cristiano saltó a escena con energía desbordante.
La primera imagen de Witt fue la un hombre hecho uno con su teclado, vistiendo traje entero y con una pequeña Biblia a su lado.
Antes de su aparición en el escenario, seis jóvenes del Instituto Canzion de Costa Rica, que él apoya a nivel internacional, y el joven estadounidense, Josué del Cid, sirvieron como teloneros, antes del protagonista de la noche.
En su primera intervención, Witt interpretó el tema Gracias, como un claro gesto de agradecimiento a Dios, a quien el cantautor considera como el principal gestor de su prolífera carrera.
Le siguió una rítmica seguidilla de temas como Tú y yo , Te exaltamos , Enciende una luz y Al que es digno . Un vistoso juego de luces y un potente sonido conformaron una introducción musical “grande”, tal como Witt la calificó.
“Todas las alabanzas para Dios deben ser ‘grandes’. Por eso alabamos con luces y sonidos fuertes. A quien le molesta es porque, claro, la alabanza no es para él”, proclamó el artista.
Dejando claro el motivo y para quien ha cantado durante un cuarto de siglo, el solista le dedicó a su máximo inspirador tres canciones: Canción a mi Dios , Motivo de mi canción y Es por ti .
Un poco antes, Witt mostró un emotivo video en el que se vieron fotos y pasajes importantes de su vida personal y artística. El niño y el adolescente estuvieron dentro de los retratos.
“Hace mucho tiempo, cuando tenía como 16 años, escribí esta canción. Fue una declaración que me salió del corazón; se llama Te amo ”, dijo Witt.
La velada musical bajó las revoluciones para dar cabida a una suave balada, en la que, guiados por una sonora trompeta, Witt sacó una de sus mejores melodías.
Aprovechando la atmósfera, Witt cantó Cuan bello es el Señor , tema que, por años, se ha apoderado del repertorio cristiano.
Luego, el artista homenajeó al compositor cristiano Juan Salinas, quien, según Witt, fue uno de los principales impulsores de su carrera artística. De Salinas, Witt cantó Has cambiado , Un adorador y Será llena la Tierra .
“En los momentos más oscuros de mi vida, iba yo quebrantado, pensando en dejar la música. En ese momentos, manejando un carro, Dios me recordó que siempre ha sido fiel”, aseguró el cantautor.
Los temas Dios ha sido fiel y Tu fidelidad cerraron la primera parte de concierto.
Pausa y acción. Luego de un receso de 15 minutos, Witt volvió con otro look . Cambió el traje entero por un frac brillante, jeans , una camiseta azul y tenis blancas.
Nuevamente, el cantante aceleró las revoluciones para interpretar alabanzas como Se oye en las naciones , Levantate , Poderoso , Aleluya , Cristo es mi Señor y Tú harás .
Acto seguido se sentó nuevamente en el teclado, limpió su sudor y compartió con la audiencia todas las canciones que, según él, le fueron inspiradas en el baño, taxis, aviones y hasta carreteras.
“La radio del Espíritu Santo puede sintonizarse en cualquier lugar. Vean este video de todas las melodías que he descubierto mientras me ducho”, manifestó.
Un saludo virtual del cantautor dominicano Juan Luis Guerra, que cantó el tema Renuévame a estilo de bachata, motivó los últimos respiros del recital.
De esa forma, llegaron temas como Tu amor por mí , Yo te busco , Tu mirada , Hermoso eres , así como Dios de pactos .
Antes de partir, Witt dedicó 15 minutos de su concierto a orar por los presentes, sacando así su talento de predicador.
Con fuerza y la entrega de su gente, Witt cerró su concierto con Somos el pueblo de Dios , una de su canciones más emblemáticas.