Cuando Antonio Banderas empezó a actuar en Estados Unidos no hablaba inglés y se destacó interpretando a un músico cubano exiliado, al Ché Guevara o al Zorro. Años después, aunque es europeo, algunos medios de Hollywood le colocaron la etiqueta de “actor de color”. ¿Solo por hablar español?
Ocurrió después de que el actor de 59 años recibiera su primera nominación al Óscar por su papel como el álter ego de Pedro Almodóvar en Dolor y gloria.
Los sitios de Vanity Fair y Deadline lo destacaron como uno de los dos “actores de color” nominados –junto a la actriz negra Cynthia Erivo, quien encarna a una esclava en Harriet– en medio de un nuevo escándalo por la falta de diversidad entre los aspirantes al premio más importante del cine estadounidense.
Ambos medios terminaron borrando tuits o corrigiendo sus textos después de duras críticas en las redes sociales.
Para Tom Nunan, productor de Crash, ganadora del Óscar en la que actuaron varios actores de minorías étnicas en Estados Unidos, el término “actor de color” es “reduccionista”. “Es usado para asiáticos, latinos... Fue un término que originalmente se usaba para describir a actores negros”, explica a la AFP el también profesor de la Escuela de Teatro, Cine y Televisión de la UCLA.
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“Históricamente subrepresentada”
Además del papel de Néstor Castillo en Los reyes del mambo y Alejandro Murrieta como el nuevo Zorro, Banderas interpretó en Estados Unidos otros personajes latinos como El Mariachi en Desperado y Pancho Villa en una serie de televisión.
“Apreciamos su enorme talento y su trayectoria interpretando personajes complejos, pero Banderas es europeo y el papel por el que fue nominado al Óscar refleja una perspectiva española”, dijo a la AFP Benjamín López, director ejecutivo de la Asociación de Productores Latinos Independientes en Estados Unidos.
"Desde la perspectiva de Estados Unidos, es evidente que nuestra comunidad ha sido históricamente subrepresentada en Hollywood", siguió. "Necesitamos priorizar las soluciones que puedan conducir a un aumento sustancial de historias y talento Latino en Estados Unidos para que sean apoyadas por toda la industria y finalmente sean reconocidas durante la temporada de premios".
Seis intérpretes latinos, de una veintena de nominados, ganaron un Óscar de actuación, la última de ellas, la mexicana-keniana Lupita Nyong’o en el 2013 por 12 años de esclavitud; su compatriota Marina de Tavira fue nominada el año pasado, por Roma.
Javier Bardem y su esposa Penélope Cruz han sido los únicos españoles en ganar el codiciado galardón... ¿Será Banderas el próximo?