EFE. Los Ángeles. A pesar de su heroísmo y sus extravagantes efectos especiales, la película John Carter , de Disney, fue en el 2012 un desastre de taquilla.
A nivel mundial, John Carter obtuvo una raquítica y decepcionante ganancia de $24 millones, pasando a engrosar la lista negra de Hollywood en sus historias sobre Marte.
John Carter se trató del segundo fracaso de Disney en tan solo dos años, pues ya había mordido el polvo con Marte necesita mamás . Realizada con actores reales, sensores de captura de movimiento y bajo la dirección de Robert Zemeckis , esta cinta de animación digital se rodó con un presupuesto de $150 millones de dólares pero solo logró recaudar $39 millones.
Anteriormente, la temática marciana había hecho sucumbir a Disney con títulos como Misión a Marte (2000) o Mi marciano favorito (1999), que rindieron por debajo de las expectativas.
Marte le jugó también una mala pasada a Warner en el 2000, con Planeta rojo , un thriller de astronautas protagonizado por Val Kilmer, que recuperó en taquilla solo 33 de los $80 millones de su presupuesto.
También de Warner fue Mars Attacks! (1996), que a pesar de tener un reparto plagado de estrellas fracasó en EE. UU, donde únicamente ingresó $37 millones.
En última instancia, Mars Attacks! logró esquivar la ruina gracias a sus proyecciones internacionales, que elevaron su recaudación final a $101 millones.
El terror de John Carpenter en Fantasmas de Marte (2001) fue otro fracaso; la cinta obtuvo $14 millones en la taquilla, aproximadamente la mitad de su costo de producción. Otro mal negocio fue Doom , con Karl Urban y Dwayne Johnson en el reparto, que consiguió recaudar $5 millones menos que lo que costó hacerla.