Entre las películas del universo Marvel, Thor siempre pareció tener las de perder. Las cintas del Dios del Trueno nunca fueron tan populares como las de Iron Man ni tampoco tuvieron tanto impulso como las del Capitán América.
Al menos ha sido así hasta ahora y cuando se revisa la taquilla histórica la diferencia se cuenta en millones de dólares.
Pero en Marvel y Walt Disney están decididos a cambiarlo todo: Thor: Ragnarok (2017), el filme de acción que se estrena mañana en los cines ticos y que representa la tercera película del personaje nórdico en cines, el humor entra a jugar como uno de sus principales atributos.
En efecto, Thor: Ragnarok ha sido anunciada como una versión diferente del gran Thor. Para tales efectos, los productores del filme ficharon al director neozelandés, Taika Waititi, con la fe de que inyectaría su sensibilidad cómica al proyecto.
El libertino documental sobre vampiros What We Do In the Shadows (2014) –calificado por El País “como la comedia de culto de la temporada”– bastó para convencerlos de que era el indicado para la ansiada transformación.
“Lo primero que pensé fue que yo abordaría esta película de un modo muy diferente a las dos primeras entregas. Y Marvel estuvo de acuerdo”, comentó Waititi en una entrevista con Disney Studio Latinoamérica.
“Me entusiasmó aún más cuando Marvel me dijo que querían introducir un verdadero cambio en la franquicia. Querían llevar a Thor en otra dirección, ponerlo en el espacio exterior y que pasara la menor cantidad de tiempo posible en la Tierra. Querían que fuera gracioso y que viviera una gran aventura”, agregó el cineasta.
Para comenzar la tarea había que iniciar con el protagonista. A Thor, encarnado otra vez por Chris Hemsworth, le quitaron el martillo y le cambiaron el corte de pelo. Luego agregaron un poco de Led Zeppelin a la música del filme y le dijeron al diseñador de producción que entre más luces de neón, mejor.
“Es evidente que este filme quisimos relajarnos un poco y divertirnos un poco”, comentó Hemsworth.
“Creo que, en definitiva, un vestuario diferente, armas diferentes y un elenco diferente, te da una energía distinta”, agregó el intérprete.
El caso es que con esas llamativas y estrambóticas variantes se cocinó el nuevo conflicto cinematográfico de Thor, el mismo que ya cuenta con el beneplácito mayoritario de la crítica y que tiene a Hulk como uno de sus principales atractivos.
El filme “ofrece a Hemsworth la oportunidad de encontrar el tono cómico . Lo hace de manera experta, y el humor de autoburla es muy bienvenido dado lo soso que es esencialmente Thor”, escribió al respecto The Hollywood Reporter.
Pero esta vez, ¿qué tiene preocupado a Thor?
Pues resulta que Thor tiene una hermana mayor perdida. Se llama Hela (Cate Blanchett) y es la primera villana femenina que se introduce en el entramado del universo fílmico de Marvel.
Hela es una mujer complicada, al punto que su padre Odín (Anthony Hopkins) tuvo que encerrar porque era demasiado peligrosa.
La diosa de la muerte le llaman y será por algo.
El asunto es que un suceso ocurre y Hela se libera de las cadenas. Ella es muy fuerte, más que Thor, y está muy enojada, así que golpea al protagonista hasta llevarlo a otra dimensión mientras ella se dirige a Asgard para reclamar el trono.
“Ha sido desterrada durante mucho tiempo. Creo que si estás en esa situación por 5.000 años te enfadarías un poco”, dijo Blanchett sobre su personaje.
“Creo que Hela es un personaje interesante, al que me emocionó mucho interpretar, pues trae el concepto de muerte a un mundo ostensiblemente inmortal”, agregó Blanchett.
Hela, según las notas de producción de la cinta, “es una criatura que proviene de una era siniestra del universo. Su poder no se parece a nada conocido en los Nueve Mundos y tiene la habilidad de liberar armas ilimitadas de maneras sorprendentes y mortales”.
Su regreso está cimentado por la venganza y con un mortal ejército “buscará dar paso a una nueva era de fría brutalidad en Asgard y el universo entero” agregan los adelantos.
En el limbo. Pero mientras Hela está fuera apoderándose con una gran seriedad del poder, Thor entra en una subtrama irreverente y cómica en el planeta Sakaar, una especie de terreno baldío al final del universo gobernado por un tipo raro que se hace llamar Gran Maestro (Jeff Goldblum).
Aunque esa parte de la película lo hará reír mucho en la butaca, lo cierto es que Thor no está nada cómodo allí. Se sabe preso y neutralizado al otro lado del universo, mientras Hela hace de las suyas en su mundo.
“Esta parte es realmente divertida y es donde la irreverencia de Waititi brilla totalmente con enredos y un guion inteligente. No es de sorprender que le quede bien el papel a Goldblum, aunque el verdadero encanto es Hemsworth, quien sabe cómo subvertir el carácter de Thor sin convertirlo en una parodia”, comentó en forma crítica Lindsey Bahr, de AP.
El caso es que mientras logra escapar de la extraña dimensión en la que se encuentra, Thor tendrá mil aventuras por las que transitar. Por ejemplo conocerá a Valkiria (Tessa Thompson), una luchadora a la que le gusta beber mucho y tiene un pasado secreto que preferiría olvidar.
Además, en esa etapa, llega uno de los momentos más esperados por los fans: el cara a cara con Hulk (Mark Ruffalo).
Tal como ya lo había visto el mundo, en el adelanto de la película, una competición letal de gladiadores será el ring que los enfrentará en la nueva historia.
Conforme avance la trama el público también será testigo del reencuentro entre Thor y Loki (Tom Hiddleston)–el villano por excelencia de las anteriores películas–.
Sobre este nuevo episodio y sus implicaciones dentro de la historia Hiddleston comentó: “Thor tiene muchas dudas y Loki, fiel a su estilo, no está disponible para responderlas”.
Thor: Ragnarok se exhibe en formato 3D, 2D, Imax y Atmos. Si le sirve de referencia para elegir qué ver el fin de semana, el sitio de crítica Rotten Tomatoes da un 98% de críticas positivas para Thor: Ragnarok .