Para los 23 artistas costarricenses que participan en la exposición “Acuarela sin límites”, esta milenaria técnica pictórica ofrece posibilidades inagotables de experimentación.
La muestra se exhibe en la Galería Nacional del Museo de los Niños y ofrece las novedosas propuestas de un grupo de creadores ticos que rompió los esquemas tradicionales de la acuarela.
Los artistas participantes son miembros de la Asociación Costarricense de Acuarelistas (Costacuarela), y las obras que exhiben son el resultado de un trabajo de experimentación con materiales, soportes, formatos y diseños.
“Todos estos artistas dominan con gran maestría el procedimiento tradicional de pintar acuarelas; sin embargo, aceptaron el reto de trascender esos lineamientos convencionales e ir más allá de los típicos paisajes y bodegones pintados con sumo detalle en pliegos de papel pequeños”, explicó la curadora de la exposición, Elizabeth Barquero.
Arte remozado. De acuerdo con la curadora, los artistas aprovecharon cualquier aspecto de la acuarela para darle un sorpresivo giro. “Por ejemplo, la temática tradicional del paisaje sigue vigente, pero el tratamiento es distinto: tiende hacia la síntesis, la estilización o la abstracción”, afirmó Barquero.Este es el caso de las obras Atardecer , de Lila Herrera, Sacudida , Derrame y Otoño con árboles , de Thelma Victory, y Playa Hermosa I y Playa Hermosa II , de Fabio Herrera. Muchos de los creadores enriquecen sus propuestas con el uso creativo de materiales como textiles, polvo de oro, tinta china, hojas, plumas y relieves. La obra Hilar con el cielo , de Herbert Bolaños, fue elaborada con hilos de color dorado y plateado sobre papel de acuarela.
“En la técnica convencional, la transparencia se da por el balance del pigmento y el agua sobre la superficie del papel. Con esta obra interpreto la transparencia como una textura y, para ello, utilicé los medios convencionales de la acuarela junto con hilos urdidos y tramados de manera espontánea”, dijo Bolaños.
Varios creadores prefieren jugar con el espacio. En sus obras Reflejo I y Reflejo II la artista Dunia Molina dota a la acuarela de un carácter tridimensional al utilizar espejos que se integran al conjunto, mientras que Walter Herrera sorprende con un móvil de mariposas y un papalote.
Silvia Monge plasma la temática de la figura humana en soportes nada típicos para la acuarela: un par de sombrillas y una escultura de cartón colocada sobre una banca de madera, y Sonia Vargas presenta un conjunto de cinco pirámides ornamentadas con motivos florales. Algunas artistas como Xinia Matamoros adaptan otros elementos como la luz para subrayar los diseños pictóricos.
“Acuarela sin límites” se exhibirá hasta el 29 de octubre.