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Entre otras llamadas, un teléfono hermoso sirve para llamar la atención: ¿quién sabe si, usándolo, nuestras palabras nos salgan mejor? La gente piensa que lo útil puede ser bello, pero los diseñadores nos prueban que lo bello puede ser útil. Aquí, en esta sala inmensa, está la demostración.
Las pruebas las dan más de cien alumnos y profesores de la Escuela de Artes Plásticas de la Universidad de Costa Rica que presentan la Exposición Colectiva Cátedra de Diseño Gráfico en el edificio del Centro del Patrimonio. Es la primera exhibición de profesores y alumnos ofrecida fuera de la UCR.
Se exponen trabajos planos (fotos y diseños) y tridimensionales (cajas y libros troquelados) en las técnicas de fotografía, gráfica editorial, cartel, imagen corporativa, ilustración, señalética, pictograma y diseño de producto, entre otras.
El director de la Escuela de Artes Plásticas, Eric Hidalgo, nos dice:
–Esta exposición muestra la diversidad y la complejidad de los temas que abordan tanto los estudiantes como los docentes de las tres sedes universitarias donde impartimos la especialidad de Diseño Gráfico: San Ramón, Alajuela y San José. En marzo del 2015 iniciaremos también la carrera de Diseño Gráfico en la Sede del Atlántico, en Turrialba.
Las obras de los profesores denotan un acabado impecable, pero lo más sorprendente es el nivel profesional que demuestran los alumnos. “Deseamos dar a conocer el maravilloso talento de nuestros constructores de metáforas visuales”, afirma la profesora Nancy Castro Lizano, coordinadora de la Especialidad de Diseño Gráfico.
Asombrosa variedad. La tipografía es una de las especialidades presentes. El diseño de letras siempre ha sido un arte: empezó con la caligrafía y continuó con la imprenta, y el cartelismo exhibido por la UCR confirma que, en cuanto a la palabra, la elegancia no solo está en el significado, sino en el trazo.
La fotografía pura y la publicitaria miran hacia la sala con trabajos de Kristell Faerron y Hawi Castañeda, entre otros alumnos.
En los pictogramas, la composición incluye dibujos estilizados que forman una “familia”, como los de comidas típicas (tamal, rosquillas, etc.) de Taryn Solano Santana, y como el juego de memoria con tarjetas de Melany Villalobos.
La señalética es un diseño que orienta a las personas que desean llegar a un sitio. Juan Soto Segura creó un diseño imaginario para no perderse en el castillo de Harry Potter.
Los diseños de imagen corporativa se destinan a visualizar estéticamente la existencia de una ONG o de una empresa mediante la creación de logotipos y la selección de los colores, entre otros elementos.
Una geisha (de Kristell Faerron) y el rostro de un hombre (de Esteban Martínez Castillo) posan cuatro veces cada uno, y van simplificándose: es la estilización, que invita a pasar del realismo a la abstracción o a la sencillez geométrica.
Un bello Catálogo de infusiones, de Rocío Chacón Álvarez, acompaña a diseños de libros y de discos. Un ejemplo: el libro Espantos de Costa Rica , inspirado en leyendas como el Cadejos y la Tule Vieja.
Los calendarios han ocupado los días de los estudiantes e incluyen aportes de varios alumnos, como Juan Madrigal Cubero y Jonathan Pacheco Retana, quienes crearon un calendario con ranas de Costa Rica. Este trabajo es un ejemplo de dibujo hiperrealista, el último curso de dibujo que se sigue en la UCR.
El diseño de producto comercial es otro campo de trabajo, y un ejemplo lo ofrece Roberto Brenes Morera. Bajo la dirección del profesor Miguel Casafont, Roberto diseñó los envases de vidrio y de cartón y la foto publicitaria de un perfume.
Esteban Martínez, alumno de Eugenia Picado Maykall, exhibe Briko , un diseño de empaque que muestra, con bocetos, el proceso de ejecución.
El arte de la 3D. Ahora nos salen al encuentro libros en tercera dimensión. Se llaman “pop-up” (que saltan) e incluyen cartulinas impresas y troqueladas entre dos hojas: al abrirlas, una figura se arma sola. Mariana Weintz exhibe el “pop-up” Apifobia (miedo a las abejas), y Natalia Fernández, Claustrofobia (miedo a los espacios cerrados): temores que saltan a la vista.
Juan Carlos Soto creó cinco elegantes cajas de cartón que encerrarán productos, tal vez de joyería.
Todos son trabajos complejos, implican conocer ilustración, diseño de ingeniería y troquelado. El profesor de este arte es José María Castro Madriz.
Otra técnica son los diseños de patrones: se forman a partir de la repetición de un dibujo siguiendo líneas rectas o curvas. Su insistencia hipnótica genera un efecto visual está cerca del “op art”.
El profesor Andrés Cruz Siles opina: “Hay alumnos que ya han dominado las técnicas impartidas en la carrera de Diseño Gráfico y ahora están en búsqueda de crear un lenguaje personal. Aún así, trabajamos para mejorar los detalles de la formación de cada estudiante”.
Rigor artístico. La exposición ofrece trabajos de los años 2013 y 2014. Los alumnos ya han llevado dos años de estudios comunes con los estudiantes de otras especialidades artísticas. Los años tercero y cuarto (final) ya son de la especialidad de diseño gráfico. En los dos años iniciales, los alumnos han aprendido técnicas “ajenas” al diseño, como pintura, grabado, pigmento, cerámica y escultura, y trabajos en madera, tejidos y vidrio.
Algunos de los cursos que se llevan en Diseño Gráfico son fotografía, ilustración, tipografía, gráfica editorial, estilización, señalética, pictograma, diseño de producto y sistemas de reproducción (impresión).
Los trabajos aquí exhibidos fueron trasladados a programas informáticos, pero solo al final. “Los profesores no permitimos que se diseñe directamente en una computadora. Antes debe hacerse todo el proceso manual pues no queremos que se pierdan las destrezas aprendidas. El diseño en computadora es rígido, y nada substituye al dibujo manual”, revela Nancy Castro .
El método de trabajo es el siguiente. Los profesores plantean un tema general; por ejemplo, los árboles de Costa Rica; luego, cada estudiante elige una especie de árbol, hace bocetos y los enseña al profesor. Se inicia entonces un intercambio de opiniones entre el docente y el alumno.
A su vez, el alumno investiga cuáles artistas han plasmado el mismo tema, y hasta averigua asuntos relacionados: el árbol como especie biológica, el árbol en la cultura popular, etcétera. El arte no flota en el arte.
“Estos jóvenes buscan nuevos campos para dejar volar la imaginación. Saben que no hay límites. Escuchan a sus maestros, pero con el ímpetu del explorador que se interna en un campo desconocido en busca de un tesoro. Son conquistadores de esos vastos universos”, dice el profesor Rodrigo Quirós Cedeño.
A cada uno de estos nuevos y magníficos artistas, el diseño lo lleva de la mano.
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Arte de pared a pared
La exposición se ofrece en el Centro de Conservación del Patrimonio Cultural, en la avenida Central de San José (frente a la Librería Lehmann), de lunes a viernes de 8 a. m. a 4 p. m. Entrada gratuita. Teléfono 2010-7400.
