Guanacaste es mar y pampa, sol y lluvia; árboles y atardeceres dorados; marimba y luna; mujer y sabanero; danza, mascaradas, toros y el sabor de tortillas palmeadas o de la gallina sudada con achiote.
Eso y mucho más es Guanacaste para los ocho artistas originarios de la provincia que exhiben su obra en el antiguo cuartel de Liberia.
Dicho edificio patrimonial alberga el Museo de Guanacaste, el cual abrió dos salas para que un grupo de creadores retrataran con sus obras el alma de la provincia que los vio nacer.
La exposición fue curada por la presidenta de la Asociación Costarricense de Artistas Visuales, Rosemary Gólcher, quien destacó las obras por ser propuestas “personales y frescas”, plasmadas a través de la pintura y la fotografía.
“Se puede intuir en algunas de las creaciones el arraigo de los artistas por sus raíces en obras muy coloridas y alegres, o bien una clara búsqueda de lenguajes innovadores y propios”, opinó Gólcher.
Las obras de Rebeca Alvarado, Queral Bardet, Carlos Hiller, José Jackson, Christian Porras, Juan Carlos Ruiz, Vladimir Rocha y Norma Varela deleitan al espectador con cautivadores paisajes marinos y montañosos, retazos de las vivencias cotidianas, escenas de las fiestas tradicionales guanacastecas e incluso imágenes más abstractas pobladas por personajes oníricos.
La directora de la Oficina Regional de Cultura de Guanacaste, Vera Vargas, destacó la efervescencia del movimiento artístico en la provincia. “Sus creadores experimentan dentro de un entorno vivo y lleno de paisajes y motivaciones diversas”. La muestra se exhibirá al público hasta el 15 de noviembre.