Es muy fácil tener claro qué es Merecumbé. En unos cuantos meses, la compañía cumplirá 28 años de ser el sinónimo del baile popular en Costa Rica. Su premisa de sistematizar los distintos géneros de baile de salón fue efectiva y clara.
Sin embargo, el espectáculo que presentarán los bailarines de Merecumbé este fin de semana es otro apartado. Sí, siempre estará la presencia de las cinturas sueltas, el íntimo contacto humano y el movimiento criollo al son de la música, pero sus usuales expresiones serán interpretadas desde la óptica de la danza contemporánea.
“Es muy poético, es muy sentido. El baile popular siempre mueve, pero en esta oportunidad se siente muy diferente. Se toma de manera muy espiritual”, advierte Lilliana Valle, directora de Merecumbé, sobre el espectáculo El lenguaje secreto de los guardianes, donde el aclamado coreógrafo Rogelio López estudia y reimagina las posibilidades que ofrece la danza popular.
“Es algo que hace años quería hacer”, cuenta con entusiasmo López, ganador del Premio Magón 2011. “Tenía muchas ideas y fue una explosión de reflexiones sobre lo que significa el baile popular y en especial Merecumbé, que para mí es sinónimo de Lilliana Valle”.
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Una revisión novedosa
Hace poco más de 40 años, cuando Lilliana Valle y Rogelio López se conocieron en un curso de danza, comenzó una larga amistad que cruzó las fronteras de la creatividad.
Muchas sobremesas de discusión sobre el estado de la danza los hizo conectarse en un alto nivel de ingenio creativo, incluso llevando a ambos a ser pioneros en la fundación de la compañía Danza Universitaria, de la Universidad de Costa Rica.
Para ambos, es difícil calcular el año en que empezaron a discutir la posibilidad de combinar sus frentes de trabajo. Por un lado, Valle se convirtió en una estudiosa de la danza popular y, posteriormente, en una emprendedora de enraizar estos géneros en distintas regiones del país, con salones de baile que superaron los límites del Gran Área Metropolitana.
Por su parte, Rogelio López ha turnado sus estudios sobre danza contemporánea con coreografías como El lenguaje secreto de los guardianes donde, asegura, lleva la teoría a la práctica para descifrar qué hace que la humanidad se levante de su asiento para moverse.
“El baile es la ruptura de la inhibición y eso me parece fascinante. Pasamos toda nuestra vida sentados, en la escuela, en el colegio, en la universidad... Pero cuando nos levantamos del asiento es por algo. Lo que me interesa estudiar es qué nos hace levantarnos y el baile popular aporta muchísimos insumos para descifrar ese lenguaje, tal cual se menciona en el título de esta obra”, cuenta el coreógrafo.
El lenguaje secreto de los guardianes es una obra que habla sobre los códigos que existen en la sociedad y cómo el baile, en especial el bolero, permite que se rompan las inhibiciones entre los seres humanos.
“¿Qué hace que yo me levante, me ponga al lado de alguien a quien no conozco y bailemos y tengamos un momento íntimo? Solo el baile permite esto. Existe un lenguaje secreto, existen códigos por descifrar que nos permiten llegar a este momento de éxtasis que quita todos los tabúes”, explica López.
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Valle, quien se deshace en palabras de admiración por López, asegura que esta nueva interpretación del bolero ha sido de gran crecimiento para su compañía.
“Como Rogelio transmite tanta energía fue sencillo para los muchachos adaptarse. Fue una conexión que fluyó muy naturalmente”, asegura.
Dos mundos fusionados
Aunque la coreografía lleva la firma de López, Valle aparece en los créditos del espectáculo como asesora artística. López también confirma que el show sería imposible de concretar sin una mirada de estudio del bolero como la que aporta Valle.
Entonces, ¿dónde termina López y dónde comienza Valle en el espectáculo?
Para ambos, la respuesta es la misma: la confluencia de ideas no sucede estructuralmente, sino que comenzó desde los primeros bocetos en una mesa hasta las constantes revisiones de los ensayos.
Desde hace un año, López comenzó una gira por todo el país para conocer el mundo de las academias de baile popular de Merecumbé. Desde la zona norte hasta el sur, encontró una gran fascinación por la forma en que calientan los bailarines de este género a tal punto en que el primer acto del espectáculo se explora lo que significa “calentar” el cuerpo para bailar.
Así, López declara las intenciones de su obra: el público visualiza a los bailarines del show en su rutina de preparación, con un ritmo, que poco a poco, desencadena en movimientos conjuntos típicos de la danza contemporánea.
Después, la coreografía aborda una ruptura amorosa que será el eje cardinal del resto del espectáculo. El baile se encarga de indagar sobre los dolores de un amor a punto de acabar, para finalizar con un híbrido de géneros donde se encontrará el bolero más puro mezclado con ritmos como géneros tribales africanos y ballet.
“Y al fondo de todo esto que hace Rogelio se encuentra una nostalgia crítica por los salones de baile que se han perdido. No es una nostalgia gratuita, es un recordatorio sobre lo que provoca la danza en la sociedad", concluye Valle.
Vea el espectáculo
El lenguaje secreto de los guardianes completa sus créditos con otras figuras destacadas. La escenografía corre a cargo de Carlos Schmitd, los audiovisuales son de Roberto Peralta, el diseño de vestuario es de Hazel Torres y la música es compilada y compuesta por Fabián Arroyo.
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La obra tendrán funciones en el Teatro Melico Salazar el viernes 28 y el sábado 29 de junio, a las 8 p. m. Las entradas cuestan desde los ¢5.000 hasta los ¢7.000. Se pueden conseguir en la boletería del teatro y llamando al 2295-6032.