Una mujer habla de sus pertenencias más significativas: un ábaco, una brújula y un reloj. Su testimonio nos permite deducir que los objetos, en realidad, simbolizan la tríada fundamental de toda estrategia: cálculo, dirección (objetivo) y tiempo. El relato de la joven se transforma en un manifiesto sobre la guerra en la cual las mujeres confrontan, de manera programática, la opresión masculina.
Estrategas es una reflexión escénica vinculada a los riesgos cotidianos de ser mujer en Costa Rica: desde el insulto disfrazado de piropo hasta la violación y el feminicidio, la amplia gama de agresiones es expuesta para exigir un cese de las hostilidades. Más relevante aún es la necesidad de las artistas de informar sobre mecanismos de resistencia individual y colectiva.
La obra se estructura a partir de la alternancia de monólogos, interacciones con la audiencia, escenas grupales y canciones rap con letras de corte feminista. No hay una anécdota principal, sino una sucesión de cuadros hilvanados por la temática.
Por lo anterior, en términos formales, no podríamos referirnos a un musical, pero sí a un montaje que deposita su mayor carga ideológica en las canciones.
El trabajo del elenco se caracteriza por la potencia de las interpretaciones musicales y por un estilo que tiende más a la espontaneidad que a la demostración de pericia técnica o a la búsqueda de personajes complejos. Esta es una decisión estética consciente que ubica la experiencia escénica en el ámbito del evento callejero urbano, político y contestatario, en sintonía con el marco cultural del hip-hop, al cual pertenece el rap.
Aunque el tono preponderante del espectáculo es lúdico, aparecen numerosos e intensos pasajes que concentran la frustración y el enojo de las mujeres a raíz de las agresiones sufridas y la inoperancia del entramado institucional para acuerpar la lucha feminista. De allí que el público gravite entre las risas provocadas por unas superheroínas farsescas, la tensión familiar ante un abuso sexual o el silencio doloroso de una chica recién violada.
Esta diversidad emocional no pierde de vista el norte pedagógico del proyecto. A cada instante surge una consigna o, en lo concreto, estrategias para desestabilizar el sistema patriarcal y las organizaciones que lo refuerzan. No hay tregua en esta guerra por lo que cualquier varón satisfecho con el orden actual de cosas se sentirá interpelado y, probablemente, incómodo durante la velada.
Estrategas es teatro militante adaptable tanto a una sala convencional como al espacio público. De hecho, es más útil y urgente en este último tipo de ámbitos. La importancia del proyecto radica en su capacidad de sintetizar un pensamiento que se convierte en ruta de acción e incidencia social. En otras palabras, nos referimos a un planteo político desplegado como práctica artística.
En un contexto de polarización ideológica que pone el cuerpo de la mujer en el centro de debates moralistas acaparados por hombres, este espectáculo alza la voz para estimular la sororidad, proponer la construcción de redes femeninas de cuido mutuo y convocar a una batalla que le ponga fin a la peligrosa odisea de ser mujer.
Ficha artística
- Dirección y dramaturgia: Noelia Cruz
- Asistencia de dirección: Michelle Pérez
- Actuación: Fabiola Brenes, Natalia Murillo, Daniela Blu Quesada, Irene Gutiérrez
- Manejo de sonido: Byron Espinoza
- Manejos de luces: David Rojas
- Diseño gráfico: Noelia Cruz
- Fotografía: Juan Calivá
- Grafiti: Mush
- Producción y diseños escénicos: La cuadrilla escénica
- Espacio: Teatro Vargas Calvo
- Fecha: 21 de julio del 2019