Un año después de haber saltado en la escena literaria con El vuelo del Quetzal (Uruk Editores), el filósofo y periodista Miguel Martí publica un libro tan emotivo como revelador.
Se trata de La Primera Noche Tranquila, editada por el sello ABYAD. Esta novela narra cómo fue la lucha que se dio y que finalmente condujo a que, en 1992, la Sala Constitucional emitiera una sentencia histórica, decretando que el derecho a ser aliviado del dolor es válido para todos los costarricenses.
El libro presenta la historia de María, una mujer con cáncer de útero que busca riesgosas alternativas para reducir su dolor.
Martí conversó con Viva para detallar cómo dio con esta historia y cómo fue el proceso para dotar el relato con herramientas de la literatura y la ficción.
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—La novela dice estar basada en hechos reales. ¿Cómo encontró la historia que acabó contando?
—Esta obra, La Primera Noche Tranquila, puede calificarse como una novela testimonial. Se basa en mi propia experiencia. Yo viví lo que en ella se narra. Al igual que en mi primera novela, El vuelo del quetzal, acudo a vivencias personales para transformarlas en una narración en las que se mezclan realidad y ficción, intentando que por su contenido, estilo y ritmo, resulten interesantes para quien las lee.
—Su editor José Chacón ha dicho que la novela debe ser leída porque retrata un hecho histórico como lo es el tema de los cuidados paliativos. ¿Cómo asumió abordar una historia con tal magnitud?
—Durante muchas décadas, millares y millares de costarricenses vivieron una agonía espantosa sufriendo de dolor físico indescriptible. No murieron en paz. No murieron con dignidad. Y las secuelas de esa agonía terrible las siguieron sufriendo sus familiares y allegados.
”Esta novela narra cómo fue esa lucha por el derecho a ser aliviado del dolor. Esos derechos, según la sentencia, derivan del derecho a la salud, consagrado en la Constitución Política.
”Esa sentencia permitió que finalmente pudieran despegar los cuidados paliativos en nuestro país. Y más aún, se empezó a aliviar el dolor de pacientes sin que fueran terminales. Desde entonces se administra morfina a quien la requiera sin mayor problema. Esa sentencia provocó que quedara superada, de una vez por todas, la perversa combinación de prejuicios, ignorancia y arrogancia entre la mayoría del establishment médico y farmacéutico del país, que en el pasado condenó a millares de compatriotas a una muerte horrible.
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—Hay muchas reflexiones sobre el dolor y la muerte. ¿Qué tan complejo fue darle los matices a la historia para que se retrataran esos procesos con tacto y sensibilidad?
—Este fue, sin duda, un desafío importante: lograr un estilo narrativo que capturara y transmitiera las múltiples y complejas emociones humanas que afloran en situaciones semejantes, y hacerlo sin caer en el melodrama y siempre con profundo respeto. Los lectores dirán si lo logré.
—El título de la novela es fabuloso. ¿Cómo dio con ese título?
—Hace unos años leía un libro sobre el escritor argentino Jorge Luis Borges. Ahí encontré una frase suya que dice: “La muerte es la primera noche tranquila”. De inmediato supe que ese tendría que ser el título de esta novela.
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—¿Qué es más complejo? ¿Escribir esta novela o leerla?
—Ambos procesos son complejos. El escritor tiene que lidiar con el desafío de plasmar experiencias, reflexiones y emociones en un relato que resulte -por su estilo, ritmo y contenido- de interés para quien lo lea. Tiene el escritor el reto de “atrapar” al lector y hacerlo desde las primeras páginas, so pena de perderlo.
”Por su parte, el lector no es una ‘tabula rasa’: no interioriza de manera pasiva lo que lee. Al efectuar la lectura del texto lo enriquece con sus propias experiencias, emociones, ilusiones, recuerdos, fantasmas y demonios. Como todos somos seres en transformación constante, se podría parafrasear a Heráclito diciendo que ‘nadie lee el mismo libro dos veces’”.
—¿Cómo coloca este libro en su historial con la escritura? Ya que usted ha hecho una carrera en periodismo.
—Es ahora, ya entrado en años, que empecé a escribir novelas. Reconozco que no tengo el talento para crear historias completamente ficticias. He vivido una vida muy intensa, muy variada y llena de experiencias. Seguiré acudiendo a esa fuente para construir relatos. A diferencia de El vuelo del quetzal, esta nueva novela es más personal y más íntima. Hasta se puede decir que marca el cierre de un ciclo vital de muchos años.
Busque esta novedad literaria
La Primera Noche Tranquila se puede encontrar en las librerías Internacional, la Escalera Ilustrada y Andante. También se puede conseguir directamente en la editorial ABYAD, llamando al 6050-0416. El precio de la novela es de ¢8.000 colones.
Además, está disponible en Amazon, en formato digital e impreso en pasta suave y pasta dura.