La educadora Marcelle Taylor Brown recibió este miércoles por la noche un homenaje en el Congreso luego de ser declarada Ciudadana de Honor de Costa Rica.
“Se eligió a una mujer negra para otorgarle ese honor. Declarar a una mujer negra es un mensaje que Costa Rica está enviando al mundo. Tiene que ser un mensaje de nuestro Dios para todos y cada uno de nosotros, y para reflexionar, para ver en qué hemos contribuido para que el racismo vaya desapareciendo”, declaró la profesora de Español, expresidenta ejecutiva de Japdeva y exdiputada, de 90 años.
Taylor también aprovechó para pedirle al Gobierno de Costa Rica y a la Asamblea Legislativa que tengan como prioridad a la provincia de Limón.
“Es fundamental que vuelvan los ojos hacia Limón con leyes que promuevan una mejor convivencia para los limonenses. Nos encontramos en una situación difícil en el ámbito laboral, con familias que se han visto en la calle con sus hijos. Literalmente, no estamos inventando que hoy si almuerzan es porque no han desayunado y no hay nada más que hacer, que han tenido que retirar a sus hijos de las instituciones educativas.
“Por eso, ruego a Dios y luego a las distinguidas señoras y señores diputados de esta Asamblea Legislativa y al Gobierno de Costa Rica y los gobiernos siguientes que vuelvan sus ojos hacia mi Limón con proyectos que lleguen a reactivar la economía y traer esa calidad”, dijo.
Ella, desde el Comité Cívico Cultural Étnico de Limón, que fundó hace dos décadas junto con otras 24 personas, se convirtió en promotora del “parade” que moviliza, cada 31 de agosto, a todos los limonenses para conmemorar el Día del Negro.
La líder agregó ante los diputados que vive agradecida con Costa Rica, ya que en ningún otro país se celebra un día completo dedicado a la cultura negra.
El acto de revelación de la fotografía de Taylor como primera afrodescendiente en recibir este reconocimiento lo presidió Rodrigo Arias, presidente del Congreso.
También la diputada limonense María Carballo Arce, del PUSC, quien es primera secretaria del directorio legislativo y proponente del proyecto de ley para reconocer la trayectoria de Taylor.
Arias Sánchez manifestó que “Taylor es una mujer inigualable y su historia de vida es testimonio de perseverancia y servicio. Que este reconocimiento sea un recordatorio de su impacto y sea una fuente de inspiración para nosotros. Su vocación ha significado un impacto para innumerables cantidades de familias en Limón”.
María Carballo Arce externó que desde muy pequeña admiraba a la educadora.
“Doña Marcelle es una mujer que muestra una gran entrega a la comunidad. Siempre se ha preocupado en el área del deporte, la educación y también en la política como un medio para contribuir a la comunidad, y sobre todo, su gran amor y preocupación por preservar las raíces afrocostarricenses.
“Para nosotros los limonenses, aunque no seamos afro, adoptamos esta cultura como propia. Este reconocimiento para ella es muy importante”, agregó.
El expresidente del Congreso y exdiputado del Partido Restauración Nacional (PRN), Eduardo Cruickshank, también expresó: “Ella representa una historia viva para la provincia y el país, debido a su significativa contribución a la cultura afro. Durante las últimas tres décadas, ha sido el pilar del Grand Parade, un evento que celebra nuestra rica herencia afro, manteniéndolo vivo año tras año”.
Defensora de la identidad afrocostarricense
Marcelle Taylor Brown nació en Limón el 3 de enero de 1933.
Además de ser educadora, se ha destacado como una lideresa cultural en su provincia natal, pero más allá de eso también por su lucha y la defensa del legado afrocostarricense en todo el país.
En el 2017 ingresó a la Galería de las Mujeres por su contribución a la defensa, rescate y fortalecimiento de la cultura afrocaribeña del país y por sus luchas a favor de la inclusión de las mujeres y las niñas limonenses en la educación, la cultura, el deporte y la política, informó el Instituto Nacional de las Mujeres en su sitio web.
Taylor trabajó como docente durante 33 años, entre ellos, en el icónico Colegio Diurno de Limón. Además, hizo carrera política y fue la primera mujer negra que encabezó una papeleta del Partido Unidad Social Cristiana, que la llevó a ser electa como diputada entre 1986 y 1990.
Después de pensionarse como educadora, se dedicó de lleno al rescate de la cultura afrodescendiente.
El trabajo de Taylor ha destacado en la defensa de la cultura, la gastronomía, la herencia y la música afro para recordarles a los costarricenses que nuestras raíces negras son parte de nuestra Idiosincrasia.