María Isabel Sánchez respira, come, vive y emana periodismo. No es fortuito que este jueves 28 de enero se anunciara que el premio nacional Pío Víquez 2015 sería para la actual Directora de la Agencia de Prensa Francesa (AFP) en Venezuela y la exdirectora de la Sede Regional para Centroamérica, con sede en San José (primera mujer en ejercer este cargo).
“Siempre he pensado que el periodista no debe ser el protagonista, por eso me toma con mucha sorpresa”, comentó desde Caracas la tica de padres nicaragüenses (emigró a Costa Rica a sus siete años).
Fue la Ministra de Cultura, Sylvie Durán, quien leyó las palabras del jurado de los Premios Nacionales de Cultura que justifican tal reconocimiento: “Porque ha aceptado los desafíos que ha correspondido vivir a la mujer en el siglo XXI y es una reportera que ha demostrado con su tenacidad y su pluma que podría ejercer su labor en cualquier parte del mundo, fiel a su profesión, a sus principios y a sus valores”.
“Me siento muy honrada y me conmueve muchísimo. No quisiera que se personalizara un premio que para mí es más un reconocimiento a una forma de ejercer la profesión, que se resume en valores como la ética, la entrega y la responsabilidad social”, agregó la galardonada.
Su carrera inició en un pequeño semanario llamado Esta Semana , luego fue contratada en la agencia de noticias ACAN-EFE (Agencia Centroamericana de Noticias) para saltar finalmente a la agencia que ha sido su casa durante 23 años, AFP.
Durante ocho años fue corresponsal de la agencia francesa en Colombia y luego en Cuba. En 2011 volvió a su patria, para irse cuatro años después (esta vez a Venezuela) donde vive hoy.
Sánchez, quien obtuvo su título de periodismo en la Universidad de Costa Rica, ha recorrido América Latina de arriba a abajo para informar y explicar los conflictos que acarrea la región.
Ha realizado coberturas de la muerte de Hugo Chávez, la renuncia de Fidel Castro, el gobierno del presidente Álvaro Uribe (candidato colombiano de extrema derecha), hasta el fallido proceso de paz entre el gobierno de Pastrana y las FARC.
Para ella, cubrir en zonas de conflicto no es algo ajeno.
“Cuando hago un reportaje y veo sus caras, me conmueven sus historias de vida. No sé si pueda ser ejemplo de algo, yo simplemente hago lo que me gusta hacer. Ejerzo una profesión que me apasiona muchísimo y lo hago con absoluta seriedad y responsabilidad”.