"En unos tiempos de divisiones peligrosamente crecientes, debemos escuchar", declaró el escritor británico Kazuo Ishiguro este jueves 7 de diciembre en la Academia Sueca, en Estocolmo, en su conferencia del Premio Nobel de Literatura 2017.
El autor de obras como Los restos del día y Nunca me abandones celebró así la condecoración como Nobel de las letras, anunciado en octubre. Recibirá el premio de manos del rey Carlos XVI de Suecia este domingo, en el banquete anual de la Academia.
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Su conferencia se tituló Mi velada con El siglo veinte y otros pequeños descubrimientos. Nacido en 1954, Ishiguro se ha desempeñado como autor en la lengua inglesa, y su trabajo toca temas de alienación, hibridación cultural y la soledad contemporánea.
En la conferencia, Ishiguro contó cómo había encontrado su voz para narrar en su juventud. "De pronto una noche (...), me sorprendí escribiendo, con una nueva e insistente intensidad, sobre Japón, sobre Nagasaki, mi ciudad natal, durante los últimos días de la Segunda Guerra Mundial", recordó el autor.
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"Hoy en día, el clima dominante es tal que resulta instintivo para un joven aspirante a escritor con una herencia cultural mixta explorar en su obra sus “raíces”. Pero entonces no era ni mucho menos así. Todavía faltaban algunos años para la explosión de literatura 'multicultural' en Gran Bretaña", dictó el Nobel.
Para Ishiguro, la posibilidad de conectarse con otras personas, a través de diferencias culturales o de vacíos históricos en las memorias de sociedades, es la fuerza de su literatura.
"He estado enfatizando lo minúsculo y lo privado, porque en esencia es de esto de lo que trata mi trabajo. Una persona que escribe en una habitación silenciosa e intenta conectar con otra persona que lee en otra habitación silenciosa –o tal vez no tan silenciosa–. Las ficciones pueden entretener, en ocasiones enseñar o polemizar sobre algún tema", dijo.
"Pero para mí lo esencial es que transmiten sentimientos, que apelan a lo que compartimos como seres humanos por encima de fronteras y separaciones. Hay un montón de industrias cargadas de glamur alrededor de las ficciones: la industria del libro, la industria del cine, la industria de la televisión, la industria del teatro. Pero al final, las ficciones versan sobre una persona que le dice a otra: así lo siento yo. ¿Entiendes lo que digo? ¿Tú también lo sientes así?".
Finalmente, Ishiguro recordó la importancia política de fomentar la diversidad en la literatura.
"En primer lugar, debemos ampliar nuestro mundo literario para incorporar muchas más voces procedentes de más allá de las zonas de confort de las elitistas culturas del primer mundo. Debemos buscar con más energía para descubrir las gemas de lo que hoy siguen siendo culturas literarias desconocidas, tanto si los escritores viven en países lejanos como si lo hacen en nuestras propias comunidades. Y en segundo lugar: debemos poner mucho cuidado en no resultar en exceso estrechos o conservadores en nuestra definición de lo que es la buena literatura", declaró el Nobel.
Puede leer el discurso completo en inglés y español (y otros idiomas) en este enlace.