La ficción suele ser solamente otra forma de llamarle a la realidad. El conflicto entre ambas dimensiones se explora en los relatos de El jabalí de la media luna (Uruk Editores), el nuevo libro de Adriano Corrales.
18 cuentos escritos a lo largo de las últimas dos décadas trazan un mapa de los intereses narrativos del poeta y cuentista. Corrales explora temas y espacios diversos en este libro, que se mantiene unido por una preocupación por la literatura y su papel en el mundo.
“Sin proponérmelo, hay una línea temática en todo el libro: el erotismo, el amor y los problemas causados por el amor”, indica Corrales. “El otro tema que podría verse es el enmascaramiento de la sociedad contemporánea: el desdoblamiento de personalidades que se genera”, agrega el autor.
¿A qué se refiere con este quiebre de personalidades? “Hay muchos personajes que tienen esa problemática: se sienten, de alguna manera, perseguidos, vigilados; entonces, tratan de escapar por medio de la droga, del alcohol...”, dice.
Intereses. En cuentos como San Valentín , que inaugura el libro, abundan reflexiones sobre el acto mismo de la escritura, así como la forma en la cual el autor concibe su oficio y el efecto que tiene en lo que lo rodea.
Según Corrales, piensa de forma similar a la estadounidense Flannery O’Connor: “La ficción a veces es más real que la realidad; esa es, más o menos, mi posición, pero tengo una duda, en el sentido que creo que eso es dialéctica”.
La realidad se aproxima demasiado a la ficción y esta retorna a lo real. En ese círculo virtuoso, para Corrales, nace la literatura. “Hay personajes que, en algunos cuentos, se convierten en otro tipo de personajes, a veces la realidad corre paralela a un mundo ficticio, a un mundo que podemos llamar no natural”, explica.
Según el autor, el realismo de estos relatos se aproxima al realismo costumbrista de décadas anteriores. Empero, algunos cuentos coquetean con lo fantástico y lo mágico, con elementos como la santería y el chamanismo inmersos en la realidad narrada.
“Creo que me he acercado a través de un lenguaje muy directo, pero a la vez metafórico, poético, para dar sensación de otra realidad”, considera Corrales.