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El costarricense Araya Vlogs es conocido por explorar los rincones del mundo y dar a conocer mediante su canal de Youtube (en el que acumula más de 1 millón de suscriptores) las vivencias que experimenta.
Pero, esta vez decidió llevar consigo una parte de la cultura latinoamericana y dar a probar a personas de Etiopía algunos de los snacks más comunes que se encuentran a disposición en países como Costa Rica.
Inició con los famosos Chirulitos, de Tosty, que provocaron reacciones controvertidas. Si bien es cierto, a la mayoría de quienes los probaron le gustó, algunos asociaron su sabor con el pescado.
“No sabe como nuestro maíz. Vean el color de esto, no parece maíz, es pescado”, declaró una de las personas. Otra fue más allá y tras el primer mordisco lo tiró al suelo: “Sabe a pescado viejo”, afirmó
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Uno de los productos que generó más rechazo fue el Limoncho, ese polvo ácido con sabor a limón y sal que ha puesto a arrugar la cara a muchos ticos durante su infancia. La mayoría de los etíopes que probaron el producto lo catalogaron como amargo e incluso algunos los escupieron.
El sancarleño también dio a degustar Yipys, los tradicionales sorbetos de Pozuelo. Este gustó por lo dulce, e incluso uno de los niños que lo probó expresó que “sabe a pan del pueblo”.
Araya aprovechó para bromear con la discusión sobre cuál es el artículo correcto para referirse al producto. “Aunque la fábrica dice que es un Yipy, es una Yipy y punto”, sentenció.
El poblado etíope donde el influencer tico realizó este experimento tiene una alimentación basada en carnes de cabra y vaca y cereales; además de utilizar con frecuencia condimentación picante.
Recientemente, el costarricense realizó una gira por el país africano, donde, entre otras aventuras, ha compartido con la comunidad ‘Afar’, la cual vive en condiciones extremas con temperaturas mínimas de 35 grados centígrados y máximas de hasta 63.
