EscucharLa costarricense Valeria Rees ya jugó sus cartas en el Miss Universo 2021. Este viernes 10 de diciembre la tica mostró sus dotes sobre la pasarela durante la competencia preliminar del afamado concurso de belleza, que se lleva a cabo en Eilat, Israel.
La competencia preliminar es considerada la “prueba de fuego” del certamen internacional, pues a partir de su desempeño se eligen las 20 finalistas de la 70 edición del Miss Universo, cuya gala de coronación se tendrá lugar este domingo 12 de diciembre, a las 12 mediodía (hora Costa Rica).
La competencia preliminar estuvo a cargo de la actual Miss Universo, Andrea Meza, así como el diseñador Carson Kressley, quienes se encargaron de presentar a las concursantes en las tres rondas que se llevaron a cabo y en las que desfilaron en traje de baño y traje de gala.
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En su primera aparición frente a cámaras, Miss Costa Rica se presentó diciendo su nombre y gritó con orgullo el de Costa Rica.
Luego, Valeria salió al escenario para desfilar con un traje de baño en color blanco de una sola pieza. Para esta ronda, la Miss Costa Rica 2021 lució su cabello suelto.
“Es una estudiante de Derecho y trabaja como asesora financiera y modelo. Considera que las mujeres que apoyan a otras mujeres algún día crearán una mejor generación”, dijo Meza, la actual Miss Universo, al presentar a la tica.
Para la tercera ronda, en traje de gala, la costarricense optó por un vestido blanco strapless con una abertura al lado de la pierna derecha y con pedrería en color plateado. Además, lució su cabello suelto y zapatos en color plateado.
Durante su pasarela, en esta última ronda, los presentadores abordaron el tema de la anorexia y cómo la costarricense de 28 años superó el desorden alimenticio en la adolescencia.
Finalmente, en la competencia en traje típico, la costarricense lució un vestido plateado con detalles azules y unas alas de mariposa morpho. Su traje lo complementó con una gran corona plateada con azul.
Por la corona
Valeria Rees Loría fue elegida como Miss Costa Rica el pasado lunes 30 de agosto. Su elección fue anunciada por la organización local del certamen de belleza, que este año no realizó el concurso aprovechando la venia de Miss Universo, que permitió que se seleccionara a la reina sin un concurso de por medio.
Ella había participado en el certamen 2020, en el que resultó ganadora la ingeniera Ivonne Cerdas, de allí que la organización se inclinara por la herediana. Finalmente fue coronada como Miss Costa Rica 2021 en un programa especial, que transmitió Teletica el pasado jueves 28 de octubre.
La joven tiene una amplia experiencia sobre las pasarelas, pues comenzó su carrera como modelo desde que era una adolescente. Su experiencia incluye pasarelas nacionales -como el Mercedes-Benz Fashion Week-, así como internacionales. De hecho, debutó como modelo en el exterior a los 17 años, en Shanghái, China.
“Tener una carrera fuera del país tiene su lado bueno y malo. Lo bueno es el hecho de poder viajar y, a la vez, hacer lo que a una le gusta. Vas aprendiendo sobre otras culturas y costumbres. Lo malo, podría ser, extrañar mucho a la familia o no adaptarse rápido a un lugar, pero yo veo más beneficios”, había dicho Rees a Viva, hace algunos unos años.
Como modelo ha desfilado en pasarelas de países de América, Europa y Asia. Siempre le apasionaron los concursos de belleza, sin embargo siempre fue muy selectiva, pues quería participar en certámenes cuyos ideales fueran similares a los de ella; así llego al Miss Costa Rica.
Ahora la costarricense, quien en el 2016 fue parte del proyecto televisivo Batalla de talentos, de Repretel, busca no solo la corona sino llevar un mensaje de amor propio.
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Lucha dolorosa
Valeria Rees ha sido una abanderada de la lucha contra los trastornos alimenticios. Desde que concursaba como Miss Costa Rica Mundo, en el 2019, insistía en esta problemática, de la que ella misma fue víctima.
La joven nunca ha ocultado los problemas que tuvo con la anorexia y, por el contrario, en sus redes sociales siempre ha detallado cómo y por qué llegó a estar envuelta dentro de este trastorno alimenticio. Hace aproximadamente seis años, Rees medía 1,75 metros de estatura y llegó a pesar 45 kilos.
“Muchas veces esto (los trastornos) puede derivar de bullying, abusos, entre otros. La realidad de uno es totalmente distinta a la de muchas personas. Esto no se trata solamente de siempre querer estar delgada. En mi caso fue por otras situaciones psicológicas. Había ámbitos en los que no tenía control y eso sí lo podía controlar. Jugaba con la alimentación, estaba obsesionada con las calorías. Ahora entiendo lo que viví, pues fui donde una psicóloga y comprendí que lo que buscaba era control.
“Juraba que por tener bajo peso iba a trabajar en modelaje. Al final me rechazaron. Hay que recalcar que no hay que comentar sobre cuerpos de personas ni sobre qué comer porque en muchos de esos comentarios pueden canalizarse de forma negativa (como cuando a ella le pidieron reducir medidas)”, se sinceró en sus redes sociales.
Justamente, ese trastorno alimenticio fue el que la impulso a crear la fundación Open Cage Foundation, en la que se brindan herramientas para mejorar el estilo y la calidad de vida de personas con alto riesgo de TCAs, Body Image y concientización de temas actuales.
